Ebro Foods ha tenido unos buenos resultados de 2020 por la mayor demanda en la ‘era Covid’ y esa puede ser la principal razón de que haya engordado la remuneración de su presidente ejecutivo, Antonio Hernández Callejas. En concreto, ha cobrado 4,152 millones de euros, un 26,6% más que el año anterior, cuando recibió 3,047 millones.
En total se han destinado 6,891 millones a las remuneraciones de los 14 consejeros del líder mundial en arroz y segundo fabricante de pasta, un 17,6% más que el año anterior, cuando se llevaron 5,68 millones. Por tanto, al igual que los accionistas (que han recibido 386 millones en dividendos -tanto ordinario como extraordinario- por las desinversiones en EEUU), han participado de los buenos resultados de 2020.
Hernández Callejas recibió una remuneración fija de 251.000 euros, 23.000 euros en dietas, 152.000 euros por su pertenencia a comisiones del Consejo, un sueldo de 1,255 millones, una variable a corto plazo de 1,875 millones, una variable a largo plazo de 596.000 euros y 5.000 euros de otras sociedades del grupo. Por su parte, el vicepresidente de Ebro Foods, Demetrio Carceller, redujo ligeramente su remuneración, pasando de 401.000 euros a 400.000; mientras que su hermana María Carceller pasó de 137.000 euros a 140.000. Junto al vicepresidente, también Fernando Castelló y Corporación Financiera Alba recibieron algo menos que en 2019.