• El candidato a vicepresidente, Mike Pence, se desmarca de Trump y apoya a Ryan de cara a su reelección en la Cámara de Representantes.
  • John McCain (senador republicano) a Trump: ser candidato no le da "licencia para difamar a lo mejor de nuestra sociedad".
  • Según publica ABC News, algunos miembros del partido han comenzado a sondear la posibilidad de que Trump se retire.
  • Y según la NBC, un grupo de pesos pesados republicanos contempla pedirle directamente a Trump que abandone su tono de confrontación.
El candidato a vicepresidente por el Partido Republicano, Mike Pence, se ha desmarcado este miércoles de su líder Donald Trump y ha mostrado su apoyo al presidente de la Cámara de Representantes, Paul Ryan, de cara a su reelección en noviembre, un respaldo que Trump le había negado apenas un día antes en una entrevista, publica Efe. Pence no ha dudado en calificar a Ryan de "viejo amigo" y ha asegurado que es "un líder conservador fuerte" que, de ser reelegido, hará "grandes cosas". "Creo que necesitamos a Paul Ryan en la dirección del Congreso de Estados Unidos para reconstruir a nuestro ejército, fortalecer nuestra economía y garantizar que en este país tenemos el tipo de dirección que hará a Estados Unidos grande de nuevo", ha argumentado el gobernador de Indiana, en referencia al lema de la campaña que comparte con Trump. Según las informaciones, en el partido Republicano hay divisiones en torno a la figura de Donald Trump. Y es que las últimas actuaciones de Trump están empezando a levantar ampollas entre los republicanos más moderados, que no pueden entender cómo su candidato es capaz de criticar a los padres de un soldado musulmán caído en Irak, echar a un niño de uno de sus mítines o criticar a diestro y siniestro a los mexicanos, señala AFP. Por ejemplo, el senador John McCain, héroe de la guerra de Vietnam, le espetó que ser candidato no le daba "licencia para difamar a lo mejor de nuestra sociedad". Según publica ABC News, algunos miembros del partido han comenzado a sondear la posibilidad de que Trump se retire como candidato y deje paso a otro perfil más moderado, recoge El Economista. Pero según la NBC, un grupo de pesos pesados republicanos, entre ellos el exalcalde de Nueva York Rudy Giuliani, contempla pedirle directamente a Trump que abandone su tono de confrontación y vuelva al redil de la disciplina partidaria. Las defecciones se incrementaron tras el fin de las primarias en junio: Brent Scowcroft, ex asesor de seguridad nacional del presidente George H. W. Bush; Richard Armitage, ex secretario de Estado adjunto del presidente Bush hijo; Hank Paulson, ex secretario del Tesoro del mismo presidente, y varios ex legisladores, anunciaron que votarán por Hillary Clinton. Andrés Velázquez andres@hispanidad.com