El exministro Bernat Soria Escoms ha cobrado más de 1,2 millones de euros desde mayo de 2009 como directivo en la Fundación Progreso y Salud de la Junta de Andalucía, un ente adscrito a la entonces consejera de Salud y Consumo, María Jesús Montero, actual ministra de Hacienda y candidata del PSOE al Congreso por Sevilla, informa ABC.
“El 4 de mayo de 2009, tan sólo 27 días después de su cese como responsable de Salud y Consumo en el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero, el científico valenciano fue contratado como director del Departamento de Células Troncales del Centro Andaluz de Biología Molecular y Medicina Regenerativa (Cabimer). Como investigador «distinguido», no había sueldo que igualase al suyo en toda la Administración autonómica”, añade ABC.
“La Cámara de Cuentas de Andalucía, que fiscalizó la contabilidad de la fundación en el año 2010, mostró su sorpresa por sus elevadas retribuciones: 170.438 euros brutos anuales, incluyendo las nóminas, dos pagas extras y los incentivos. Eran «superiores a las establecidas en la tabla retributiva del personal directivo de 2010», según el ente fiscalizador. En la actualidad su sueldo ronda los 150.000 euros al año. Es el doble de su salario como ministro (81.155 euros anuales)”, explica el mismo medio.
La Cámara de Cuentas de Andalucía, que fiscalizó la contabilidad de la fundación en el año 2010, mostró su sorpresa por sus elevadas retribuciones: 170.438 euros brutos anuales, incluyendo las nóminas, dos pagas extras y los incentivos
Un informe jurídico-laboral encargado por la fundación pública a la asesoría privada PwC Tax & Legal Services S.L., al que ha tenido acceso ABC, revela que Soria tenía negocios privados al margen de su dedicación como científico estrella de la Junta durante los mandatos de tres presidentes andaluces distintos, Manuel Chaves, José Antonio Griñán y Susana Díaz.
Esa actividad privada, incompatible con la paga de 5.000 euros anuales que cobra en concepto de exclusividad, puede costarle un puesto tan rentable económicamente, según se desprende del informe jurídico de 17 páginas consultado por ABC, que apunta a «un conflicto de intereses y una transgresión de la normativa de incompatibilidades y de la buena fe contractual».
Como ha publicado Hispanidad, Bernat Soria utilizó embriones humanos como cobayas de laboratorio prometiendo que iban a curar enfermedades, cosa que no se ha demostrado. Al revés de lo ocurrido con las células madres adultas, que no matan a nadie y que han tenido éxito en distintas terapias.
Soria, icono del progresismo de los gobiernos Zapatero no ha logrado nada en el campo científico, pero su paso por el Ministerio de Sanidad con el PSOE le ha resultado muy lucrativo.