El juez Claudio Bonadio tiene carta blanca para registrar la vivienda de Cristina Fernández de Kirchner, así como otras dos propiedades de la expresidenta y su despacho en la Cámara Alta, según Deutsche Welle. Esta medida fue calificada por su abogado de ilegal, alegando que aunque no sea allanamiento de morada, se trata de un "amedrentamiento absoluto contra la senadora". Por otro lado, Bonadio considera hacer una petición al Senado para quitar los fueros legislativos que dotan a la expresidenta de cierta inmunidad que impide que el caso avance tan rápido como pudiera.
La expresidenta fue acusada de participar en sobornos relacionados con obras públicas e importantes empresas argentinas en lo que se conoce como "caso de cuadernos". En su cita para declarar ante el juez de este lunes, Fernández de Kirchner no contestó a las preguntas y, en su lugar, presentó un escrito presentado por su abogado. La expresidenta ha hecho pública su idea de que tiene lugar una falta de imparcialidad con la que se está llevando a cabo el proceso.
Fernández ha denunciado públicamente la falta de imparcialidad con la que afirma que se está tratando el caso
Según Reuters, el abogado de Fernández publicó un tuit en el que afirma que “Vuestra Señoría fue denunciado penalmente por mi representada el día 6 de julio de 2016", mensaje dirigido al juez encargado. Asimismo, la expresidenta también ha hecho uso de la red social con la intención de defender su situación.
Desde el 10 de diciembre de 2015 me armaron seis causas penales y todas ellas fueron radicadas en Comodoro Py. De las seis, cinco fueron iniciadas e impulsadas por Bonadío. ¿Milagro? No. ¿Fórum shopping?
— Cristina Kirchner (@CFKArgentina) 13 de agosto de 2018
Cabe destacar que son ya varios los grandes ejecutivos involucrados en esta trama de corrupción que han decidido rendirse ante la justicia adoptando una actitud de arrepentimiento para obtener beneficios judiciales. Además, se cuenta con la palabra de testigos que afirman que tanto Fernández como su difunto marido Kirchner eran los cabecillas del sistema.