- Ahora sí que Artur Mas se ha puesto nervioso y tacha las palabras del gobernador del Banco de España de "inmoralidad, irresponsabilidad e indecencia".
- Por cierto, quien logró unir a la banca en contra de la independencia, incluidos Caixabank y Sabadell, fue un empresario: César Alierta.
- El presidente de Telefónica ha vuelto a hablar este lunes para señalar que la independencia sería "muy negativa" para los catalanes.
Ni Obama, ni Cameron, ni Merkel ni, por supuesto, Rajoy. El que ha desatado una verdadera ciclogénesis explosiva en torno a las elecciones catalanas ha sido
Luis María Linde. Efectivamente, el gobernador del Banco de España ha dado con la palabra clave: '
corralito'. Ha sido en la mañana de este lunes, durante un
desayuno informativo –por otra parte, anodino- organizado por Europa Press.
Linde ha explicado que si
Cataluña se separa de España saldría automáticamente de la Unión Europea y de la zona Euro. Hasta ahí, nada nuevo que no se haya dicho ya. Pero entonces soltó la bomba: existe un "riesgo" de '
corralito', como ya ha ocurrido en otros países de Hispanoamérica y, más recientemente, en Grecia.
A estas alturas de la película,
Artur Mas ha escuchado todo tipo de advertencias acerca de la independencia de
Cataluña y siempre les ha dado una relativa importancia. Lo del '
corralito', sin embargo, es otro cantar.
Y vaya que si lo es. El presidente catalán en funciones y número 4 de Junts pel Sí apenas ha tardado unos minutos en responder a
Linde, y lo ha hecho tachando las palabras del gobernador de "inmoralidad, irresponsabilidad e indecencia". Por supuesto, ha negado el riesgo de '
corralito'. "Esto no es informar, es pura intoxicación con la única voluntad de infundir miedo a la gente", ha subrayado.
Comparen esto con la reacción del viernes, tras el comunicado conjunto de la AEB y la CECA, en el que alertaban sobre los riesgos secesionistas. Nada que ver. Y es que las patronales no hablaron de '
corralito'.
Por cierto, el que puso de acuerdo a la banca en contra de la independencia, incluidos a los dos bancos catalanes, Caixabank y Sabadell, no fue un banquero ni un político. Fue
César Alierta. El presidente de Telefónica, muy activo tras el verano, ha vuelto a advertir este lunes de que la secesión sería "muy negativa" para los catalanes.
"Cada uno tiene que ver qué es lo que vende al resto de España y al resto del mundo y que haga números, a ver si le interesa seguir vendiendo o no", ha señalado. "En todos los procesos de separación, el flujo comercial baja un 25% y si el flujo comercial baja, aumenta el paro, y si aumenta el paro, baja la recaudación, y si baja la recaudación, las pensiones hay que bajarlas y también el gasto público social", ha explicado.
En la misma línea se pronunció este fin de semana el presidente de BBVA, que en abril cerró la adquisición de Catalunya Banc. Según Francisco González, "en economía, las expectativas, la certidumbre, la seguridad jurídica son esenciales, y hoy España se plantea cosas que van en sentido contrario".
Como se ve, muchas advertencias sobre la independencia, pero nada comparable al '
corralito'. ¡La que has liado, pollito!
Pablo Ferrer
pablo@hispanidad.com