Mañana martes hay lecciones en generales en Israel. Se presentan más de 40 partidos políticos, para elegir a los 120 diputados que conformarán la vigésimo primera Knéset (Parlamento). La Knéset es la representación del pueblo israelí, y una vez electo este órgano, es quien designa tanto al primer ministro como al presidente.
Según las informaciones, hay dos partidos que se disputan el triunfo: Likud y Azul y Blanco.
El Likud es el actual partido de gobierno, liderado por el primer ministro durante la última década, Benjamín Netanyahu. De orientación conservadora, tiende a una economía liberal y muchos de sus miembros se oponen a la creación de un estado palestino. Apoya los asentamientos y, a pesar de no ser un partido confesional, recibe un apoyo relativamente importante en los sectores del sionismo religioso.
Y Azul y Blanco, liderado por Kajol Lavan, y en las encuestas la principal coalición opositora. Formada en febrero por la unión de los partidos Yesh Atid (Hay Futuro, de Yair Lapid), Resiliencia Israel (de Beni Gantz) y Telem. El cabeza de lista es el exjefe del Estado Mayor del Ejército Gantz, con un acuerdo de alternancia con Lapid. Se autodefine como un partido de centro, secular y socialmente inclusivo, aunque aún no se ha pronunciado con claridad en muchos temas, informa Telesur.