El pleno del Congreso aprobó ayer proseguir la tramitación de la ley de Eutanasia del PSOE. El propósito de la norma, cuya tramitación fue aprobada el pasado mes de febrero, es despenalizar la eutanasia y reconocerla como un nuevo derecho individual, bajo el eufemismo de 'suicidio asistido'.

La tramitación siguió adelante después de que el pleno del Congreso rechazase las enmiendas a la totalidad del PP y Vox, que proponían como alternativa una ley basada en los cuidados paliativos.  

La diputada de Vox María Ruiz, defendió la vida frente a la eutanasia. “Qué enorme la arrogancia de los hombres, que hacen leyes que permiten la destrucción de la vida, como si lo legalmente permitido, acabara siendo lo moralmente correcto”, ha señalado Ruiz Solás, que ha denunciado que el PSOE quieren “convertir en una prestación sanitaria, lo que no es otra cosa que matar a una persona”. “Ustedes, señores del gobierno, con esta ley, van a convertir a nuestros médicos en verdugos”. “Los que creemos en la dignidad intrínseca de la persona –señala Ruiz Solás- y en que la vida es el bien más precioso que poseemos, tenemos la obligación moral de intentar convencerles, para que paren esta locura”.

Qué enorme la arrogancia de los hombres, que hacen leyes que permiten la destrucción de la vida, como si lo legalmente permitido, acabara siendo lo moralmente correcto, denunció María Ruiz

Tras recordar cómo el PSOE ha cambiado la sociedad con las leyes del aborto, con el progresismo que trata de persuadir a las mujeres que van a tener hijos con alguna discapacidad, con alguna malformación, o con síndrome de Down, para que aborten, con los mayores en las residencias… y ahora con “las personas desesperadas por el sufrimiento, el dolor, la soledad, la frustración y la pena”, Ruiz Solás ha denunciado el chantaje emocional indigno que no hace sino “utilizar el sufrimiento de las personas, para tratar de hacernos creer que es blanco, lo que en realidad es negro”.

Curiosamente, la aprobación de la tramitación de la ley de eutanasia coincidió con la celebración del Día Internacional para la Prevención del Suicidio.

Según datos del INE publicados, en España, en 2018 hubo 3.539 muertes por suicidio, un 3,8% menos que en 2017, pero repitió como la primera causa de muerte externa.

Más cifras: cada 2 horas y media muere una persona en nuestro país por suicidio. Y por cada persona que ha muerto, al menos 20 lo han intentado, según recoge CMMEdia.

Y, anualmente, cerca de 800.000 personas se quitan la vida cada año en el mundo y muchas más intentan hacerlo, según la OMS.