Las elecciones al Parlamento Europeo tienen relevancia en algunos países más que en otros, con datos que merecen ser destacados. Según los primeros resultados, Marine Le Pen, de Agrupación Nacional, ha ganado en Francia, imponiéndose a un hundido Emmanuel Macron, al que le habría salido cara la crisis de los ‘chalecos amarillos’, y a los partidos de izquierda. De hecho, Le Pen ha aprovechado que repite como la fuerza más votada (algo que ya pasó en 2014) para instar a Macron a que convoque elecciones.
Mientras, la canciller Angela Merkel se mantiene en Alemania, con la victoria de CDU, a pesar de perder escaños y de cierto debilitamiento de la gran coalición. Resiste, por tanto, al auge de Los Verdes, que son el segundo partido más votado, duplicando su resultado respecto a 2014; seguido de los socialdemócratas y el euroescéptico AfD.
En Hungría, habría habido una victoria arrolladora de Viktor Orban. Algo que no es baladí y más después de los muchos intentos de boicot que han hecho a este país las instituciones europeas.
En Hungría, habría habido una victoria arrolladora de Viktor Orban
Los conservadores no sólo ganarían en Alemania, también en Austria, Irlanda, Grecia (donde se desploma Syriza) y Chipre, entre otros países. Por su parte, los socialdemócratas serían los más votados en Holanda y Malta.
El Partido Popular Europeo (PPE), con 177, y los socialdemócratas, con 147, serían los partidos más votados en el Parlamento Europeo, pero perderían la mayoría absoluta. Mientras, los que se pueden calificar como euroescépticos sumarían 172 y aumentan los liberales ALDE (hasta los 101) y Los Verdes.