• La liquidación de la sociedad certifica la división interna de los hermanos.
  • Dos bandos: Rafael, Leopoldo y María frente a los rebeldes Fernando y Joaquín.
  • Pero tranquilos: entre los tres primeros suman el 37,8% del capital, suficiente para seguir controlando el grupo.
Señoras, señores, Portman Baela 'ha muerto'. La familia Del Pino ha liquidado la sociedad a través de la cual poseía el 40,8% de Ferrovial. Es un movimiento lógico, y hasta esperado, tras la ruptura, en el mes de agosto, del pacto familiar que mantenían en esta sociedad instrumental. El hecho relevante remitido en la tarde de este martes a la CNMV certifica, pues, la división interna que existe en la segunda generación familiar. Los cinco hijos de don Rafael del Pino Moreno se dividen en dos bandos: por un lado, Rafael (en la imagen), Leopoldo y María; por otro, los rebeldes Fernando y Joaquín. Como recordarán, en noviembre de 2014, el menor de todos, Fernando, vendió a Rafael el 3,1% que aún poseía de Ferrovial. ¿Qué cambia a partir de ahora? Poco o mucho, según se mire. Una cosa está clara: Rafael, el mayor de los varones y presidente de la empresa, ha consolidado su posición en el grupo y ha 'expulsado' al rebelde Joaquín. Así las cosas, el reparto de Ferrovial queda de la siguiente manera: Rafael, el presidente, controla el 21,4% del capital; Leopoldo, el 8,3%, María, el 8,1% y Joaquín, el 2,5%. Adicionalmente, María y Joaquín poseen, de manera conjunta, el 1,2% a través de la sociedad Casa Grande de Cartagena. Pero no se alarmen. El control del grupo por parte de los Del Pino no corre peligro, al menos, de momento. Entre Rafael, Leopoldo y María, poseen el 37,8% de la empresa, suficiente para desanimar a posibles 'opantes' futuros. Pablo Ferrer pablo@hispanidad.com