Grifols ha aumentado su beneficio neto un 15% en el primer semestre del año, hasta 319 millones de euros, según ha informado a la CNMV.
A finales del primer semestre de 2018, la deuda financiera neta se ha situado en 5.560,3 millones de euros, incluyendo 668,5 millones de euros de caja y teniendo en cuenta, entre otros, el cierre de la adquisición del 100% del capital de Haema por 220 millones de euros, así como el pago del dividendo final correspondiente al ejercicio 2017 por importe total de 142,1 millones de euros aprobado en la Junta General Ordinaria de Accionistas.
El Ebitda se ha situado en 614,2 millones de euros en los seis primeros meses de 2018
El Ebitda se ha situado en 614,2 millones de euros en los seis primeros meses de 2018. El margen Ebitda se mantiene estable en el 29,0%. Continúa el impacto de los mayores costes de la materia prima vinculados con el plan estratégico de inversión a largo plazo para incrementar y diversificar el acceso a plasma con el objetivo de dar respuesta a la creciente demanda estimada de proteínas plasmáticas y seguir creciendo de forma sostenible.
Las inversiones netas en I+D+i se han situado en 141,3 millones de euros, que representa un incremento del +9,3% respecto el mismo periodo del 2017. Incluye inversiones internas, externas y de empresas participadas.
La cifra de negocio de Grifols se ha situado en 2.120,1 millones de euros en el primer semestre de 2018 que representa un incremento del 7,1% a tipo de cambio constante (cc) y del -3,3% teniendo en cuenta el impacto por tipos de cambio, especialmente el euro-dólar. Se consolida el crecimiento de todas las divisiones y regiones en las que opera la compañía.