Desde que empezó la crisis por el coronavirus, más de 130.000 negocios han echado el cierre en España. Desde bares a comercios muy pequeños, que no han podido sobrevivir al parón.
Por ello, los pequeños comerciantes y bares están indignados con el Gobierno de Pedro Sánchez que no solo no les ofrece ayudas sino que les obliga a abrir en condiciones deleznables como un 30% del aforo, aunque luego rectificó y lo amplió al 50%. Y todo ello a partir de la fase 1 de la desescalada, es decir, el próximo 11 de mayo y en las provincias donde se tenga controlado el número de contagios.
Y ponen como ejemplo a Alemania, que ha decidido reducir el el IVA al sector de la restauración, bares, cafeterías y restaurantes, del actual 19% al 7%, hasta finales de junio de 2021. El IVA al 7% solo se aplicará a la comida, y quedarán exentas las bebidas que se sirvan, informa Antena 3.
El objetivo es apoyar al sector - uno de los más castigados durante la pandemia por coronavirus- en el período de reapertura y aliviar los efectos económicos de las restricciones que aún están vigentes. "Los bares y restaurantes necesitarán un impulso cuando puedan volver a abrir", declaró la secretaria de Estado de Finanzas, Sarah Ryglewski.