La representación legal de los trabajadores de INDRA no daba crédito cuando, tras el verano de 2018, la dirección de la empresa les presentó el borrador de acuerdo en el que deberían aparecer los cuatro puntos ya acordados durante las negociaciones previas a las vacaciones estivales. De los cuatro puntos, la empresa, sin previo aviso, se desdijo y retiró el que hacía referencia a la jornada continua y a la equiparación de condiciones entre centros. Sencillamente, no podía seguir manteniendo el acuerdo alcanzado hacía tan solo unos meses.
El cambio de parecer sobre un acuerdo ya alcanzado puede generar movilizaciones de la plantilla
Ante este hecho inaudito -nunca antes había ocurrido algo similar en la compañía- y que daña seriamente la credibilidad de la propia empresa, según los sindicatos, los representantes de los trabajadores han decidido iniciar una serie de movilizaciones así como acciones para informar a los principales inversores y accionistas de la compañía. Hablamos de la SEPI (18,7%), de Corporación Financiera Alba (10,52%), del fondo FMR (9,3%), de Fidelity (5,6%) y de Norges Bank (3,9%).
Precisamente, todo esto ocurre en el momento en el que un Pedro Sánchez ratificado por las urnas tiene preparado al exministro Miguel Sebastián como posible sustituto del presidente, Fernando Abril-Martorell.