Prosigue la avalancha migratoria hacia España, detrás de la cual hay miles de historias trágicas. Como la de Jean, un inmigrante congoleño de 46 años que entró en Melilla en una patera por la playa de Horcas Coloradas. Era su tercer intento.
Para subir a la embarcación, Jean tuvo que conseguir 2.500 euros para pagar a las mafias. El dinero se paga solo una vez y cubre todos los intentos que sean necesarios para entrar en Melilla. Funciona así: Él entrega el dinero a un familiar en Rabat, en este caso, dice que a su hermano, y es esta persona la que paga a las mafias una vez que la patera logra entrar en Melilla, contó El Faro de Melilla.
Para subir a la embarcación, Jean tuvo que conseguir 2.500 euros para pagar a las mafias
Aunque parece que su viaje fue un golpe de suerte, Jean comenta que la travesía en patera “es muy difícil”. Sobre todo, porque tuvo que intentarlo tres veces. En la embarcación en la que llegó a Melilla viajaban otros 24 inmigrantes, entre ellos un menor de edad y cuatro mujeres.
Jean al fin y al cabo tuvo suerte porque llegó a tierra. Pero muchos de los que lo intentan no pueden contarlo, porque son abandonados a su suerte en alta mar.
Así explotan las mafias de la inmigración a personas humanas…