La Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (AIReF), en un estudio sobre Correos, ha propuesto que reparta menos días en zonas de baja demanda (de cinco a tres días), valore externalizar la red y reciba una menor compensación estatal. Por tanto, parece que lo avanzado hace tres semanas no estaba tan desencaminado, como quiso hacer ver el presidente de este organismo, José Luis Escrivá, en su Twitter.
La AIReF considera que la compensación directa con fondos públicos para el Servicio Postal Universal (SPU) es mejorable y tiene un coste neto elevado entre los 12 países que tienen esta prestación de los 32 analizados. De hecho, cree que tiene margen para mejorar la eficiencia en ingresos y gastos, lo que bajaría dicha compensación. Y critica que Correos ha sido menos decidida a la hora de reducir costes en relación a la caída de volúmenes que los operadores postales de otros países.
El organismo que preside Escrivá recomienda que el Ministerio de Fomento, con ayuda del de Hacienda, defina una nueva metodología de cálculo y flexibilice las obligaciones de servicio público (OSP), cubriendo sólo zonas rurales o áreas de bajos volúmenes. O sea, quiere menos OSP y tiene razones: el poco uso (57 envíos ordinarios por habitante en 2017 frente a los 230 del alemán DP-DHL o los 119 del luso CTT Correios) y el elevado déficit operativo (-14.59% de resultado operativo sobre facturación neta, lejos del 14,29% de su homólogo portugués o el 8,27% del alemán).
Pide flexibilizar, o sea, reducir, las obligaciones de servicio público (OSP) dado el poco uso y el elevado déficit operativo
Dentro de este plan de eficiencia de costes, estaría reducir el número de días de entrega en zonas de baja demanda, como Italia (de cinco a tres días), valorar la externalización de la red, algo que ha hecho Francia (al 50%) y Reino Unido (al 100%), y no fijar un número de oficinas para prestar el servicio. Y aunque no habla de medidas sobre la plantilla, recuerda que ha bajado un 9% entre 2012 y 2017, mientras que los envíos lo han hecho en un 31%, por lo que ha recortado menos plantilla que otros operadores. Además, recomienda la transición hacia mercados distintos y muy competitivos como el de la paquetería urgente.
Por su parte, CCOO ya ha respondido a la AIReF, calificando sus propuestas como letales porque ponen en peligro miles de empleos. Ya veremos si el Gobierno las tiene o no en cuenta, pues no podemos olvidar que Pedro Sánchez colocó al que fuera su jefe de gabinete Juan Manuel Serrano al frente de Correos tras llegar a La Moncloa.