La alianza entre el régimen chavista de Nicolás Maduro y la Rusia de Putin parece que va viento en popa.
La dictadura de Nicolás Maduro ha desplegado en Venezuela una batería antimisiles S-300, capaz de alcanzar proyectiles a 250 kilómetros de distancia y que le compró al gobierno de Rusia, informa ACN.
Y no solo eso: Rusia rechazó el miércoles la exigencia de Estados Unidos de retirar a su personal militar en Venezuela, afirmando que esa presencia es totalmente legítima, recoge El Comercio.
La portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores de Rusia dijo que la presencia del personal militar ruso en Venezuela es "en estricto cumplimiento" con la Constitución venezolana
En un comunicado publicado la tarde del martes, la portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores de Rusia, Maria Zakharova, dijo que la presencia del personal militar ruso en Venezuela es "en estricto cumplimiento" con la Constitución venezolana y con un acuerdo bilateral sobre cooperación militar. Aseguró que la misión no necesita aprobación de la Asamblea Nacional venezolana, que es controlada por la oposición.
Zakharova no detalló cuántos militares rusos viajaron a Venezuela, pero versiones de prensa indican que unos 100 militares llegaron el fin de semana al país sudamericano en dos aviones rusos, junto con unas 35 toneladas de carga.
Recordemos que China, que también ha invertido grandes sumas de dinero en la industria petrolera venezolana, respalda igualmente a Maduro.