- Aunque oficialmente, el presidente dice, en el marco de la cumbre hispano-lusa, que las únicas rebajas previstas son las del IRPF y Sociedades y del IVA, en principio, nada.
- El problema es cumplir con el déficit público pactado con Bruselas: el 4,2% del PIB este año y el 2,8% en 2016.
- Montoro y Guindos han descartado un aumento de ese impuesto, como pidió el FMI, que castigaría al turismo y amenazaría el repunte de la demanda.
- Pero según 'La Razón', el Gobierno calcula que la mejora de recaudación por el empleo, le da margan para rebajar el tipo del IVA al 20% o 19%.
La
política fiscal del Gobierno fue uno de los factores de
desgaste del PP en las elecciones autonómicas y municipales de mayo. Y ahora, el presidente
Rajoy utilizará esa misma arma fiscal, en sentido contrario y por la vía del
IVA, de cara a las elecciones generales. Ni el presidente ni sus ministros económicos,
Montoro y
Guindos, se han pronunciado al respecto, aunque sí han dejado muy claro que no subiría el IVA, como recomiendan, por ejemplo,
el Fondo Monetario o el Banco de España.
Pero un paso contrario en esa dirección, bajar el IVA, indica hasta qué punto apuntan mal las predicciones electorales para el PP en las generales y los conejos que oculta en la chistera todavía Rajoy, más directamente implicado en el partido, para ganar votos.
Es cierto que no fue el único frente de desgaste. Lo admiten ya las nuevas caras del PP, como
Pablo Casado o
Andrea Levy: también influyeron los casos de
corrupción en el partido, que alimentaron la
abstención, y la política de
comunicación para vender los logros económicos.
Sea como fuere, la política impositiva del PP se ha desviado de su eje liberal. Primero fue la drástica subida del
IRPF y después el
IVA.
Según la
información que publica este lunes
La Razón, la rebaja del IVA es una de las opciones con más apoyos en el Gobierno y lo permitiría la recuperación del empleo. En otras palabras, esa recuperación aumentaría los ingresos por renta como para compensar los menos ingresos si se baja el IVA. No obstante, el presidente del Gobierno ha dicho esta mañana, en el marco de la cumbre bilateral España-Portugal, celebrada en Baiona (Pontevedra,) que las únicas rebajas previstas son las del IRPF y Sociedades y que de la del IVA, en principio, nada de nada.
Cristóbal Montoro señaló la semana pasada en Santander, en la misma línea que Guindos, que lo que el Gobierno no se plantea ni de broma es subir el IVA, como pide el FMI, porque remaría en contra de la recuperación de la economía, en un momento, además, en que empieza a reputar la
demanda interna. Sería muy contraproducente, además, para el
sector turístico, una de las principales vías de ingresos del país.
Hoy se han conocido los datos de la
llegada de turistas extranjeros hasta mayo: han aumentado un 5,1% más, hasta 22,5 millones de turistas extranjeros. En mayo, en concreto, fueron 6,5 millones, un 6,8% más, según la Encuesta de Movimiento Turísticos en Frontera (Frontur).
Según los datos de
La Razón, el Gobierno maneja entre sus previsiones la creación de 400.000 nuevos empleos en 2015 (un 15% de ellos indefinidos), que aportarían por el
IRPF hasta 2.000 millones más de ingresos. Y eso da margen a Rajoy para bajar el
IVA. En cualquier caso, el tipo general no bajaría del nivel del 18% en el que lo dejó el PSOE, pero sí del 21% al que lo elevó el PP. La rebaja, en consecuencia, sería de uno o dos puntos, que lo dejarían entre
el 18 y el 20%.
En cualquier caso, el Gobierno deberá tener en cuenta la meta de
déficit público pactada con Bruselas: el 4,2% del PIB este año y el 2,8% en 2016, que equivalen a un recorte de los desequilibrios en dos años del 30.000 millones de euros. Por la vía de la reforma fiscal, ha dejará de ingresar entre 2015 y 2016 unos 9.000 millones. ¿Cuánto dejaría de ingresar realmente con una bajada del IVA? Ese el
quid de la cuestión.
Rafael Esparza
rafael@hispanidad.com