- Pasen y vean, que en la lista de los grandes morosos hay de todo: deportistas como Dani Pedrosa o Gabi Milito.
- Empresarios como Agapito García Sánchez, Mario Conde, Lorenzo Sanz o Victorio y Lucchino.
- También periodistas (César Vidal), abogados (Rodríguez Menéndez), financieros (Jacques Hachuel).
- Hay familias enteras como los Cosmen, Cotino, Godia, Rodilla o Ruiz Mateos.
- Y 4.510 empresas, aunque lideran el ránking tres sociedades vinculadas al ladrillo: Reyal Urbis, Nozar y Grupo Prasa.
En la
lista negra de morosos de
Hacienda hay de todo y cumplirá las expectativas de los más curiosos en eso del busca y compara, con morbo, para saber quién huye de sus obligaciones fiscales. Sobre todo porque es la primera que se hace pública y porque hay muchas caras conocidas. Ojo, los que aparecen ya estaban advertidos por el ministro de Hacienda,
Cristóbal Montoro (
en la imagen, con su equipo), pero la lista se ha conocido sólo tres días después de las elecciones generales. Paradójico, con la inquietante estela de sombras que hubiera dejado. A partir de ahora los nombres correrán de boca en boca, pero después del 20-D.
Dicho lo cual y antes de rastrear, que pueden hacerlo (
aquí tienen el listado completo publicado por la Agencia Tributaria), les adelanto que hay, sobre todo, empresas en ese enumerado de 4.885
apellidos, especialmente
inmobiliarias, y que en todos los casos se cumple un
currículum muy concreto a 31 de julio de este año: la deuda supera el millón de euros y no se ha regularizado a esa fecha.
Veamos. En total son 345 personas físicas las que aparecen (cuya deuda asciende a 700 millones, una media de 2 millones por barba) y entre ellas caras muy conocidas de deportistas, que no cobran poco precisamente.
Dani Pedrosa, piloto de moto GP, o el ex futbolista argentino del F.C. Barcelona
Gabi Milito, con deudas de 7,85 y 1,83 millones, respectivamente. Pero no son los únicos vinculados con el deporte. Hay también equipos de fútbol, como el Recreativo de Huelva, o de baloncesto, como el Juventud, todo ellos, como personas o empresas, debidamente consignados con el nombre, el NIF y el importe que se le echa en cara.
Y más caras de todo pelaje y condición (generalmente
agraciada, ya me entienden) y desigual fama: el empresario madrileño
Agapito García Sánchez, que debe la friolera de 26 millones de euros, el ex banquero
Mario Conde (9,9 millones), el juez
Luis Pascual Estevill (5,4 millones), el abogado
Emilio Rodríguez Menéndez (3,6 millones), el empresario audiovisual
José Luis Moreno (3,5 millones de euros), el financiero
Jacques Hachuel (2,6 millones), el periodista radiofónico y escritor
César Vidal (2,4 millones) o los ex presidentes del Real Madrid,
Lorenzo Sanz, y del Valencia,
Vicente Soriano Sierra, que deben 1,36 y 1,1 millones, respectivamente.
Más hilo a la cometa. En la lista aparecen familias también con una fortuna no precisamente menguada, pero que deben un
pastón, como la familia
Cosmen, dueña de Anca Corporate (deben 59,1 millones), la familia
Cotino (21,5 millones), las
Godia (2,58 millones) y
Rodilla (1,2 millones) o el presidente de la inmobilairia Aifos,
Jesús Ruiz Casado, y su mujer,
María Teresa Maldonado, que deben 9 millones.
Añadan a esas sagas algunos de los herederos del fundador de El Corte Inglés: la deuda de tres de los hermanos
Areces Galán -los mismos que rechazaron la entrada de Qatar en el grupo de distribución- asciende a tres millones.
En fin, la lista es muy amplia y afecta también a los modistos
Victorio y
Lucchino,
Javier Merino, esposo de
Mar Flores, o
Luis Miguel Rodríguez, la ex pareja de
Carmen Martínez-Bordiu, nieta de Franco.
Veamos ahora las empresas, relacionadas, sobre todo, como les decía, con el sector inmobiliario, hoy
pinchado y antaño con gloria: constructoras, promotoras, inmobiliarias. La lista la encabezan, de hecho, tres de estas sociedades,
Reyal Urbis, de
Rafael Santamaría,
Nozar y
Grupo Prasa, que deben al fisco, 378, 203 y 101 millones, respectivamente.
También del sector y con importantes deudas están la inmobiliaria
Aifos (96 millones), la promotora
Promaga (71 millones) o la fallida
Matinsa Fadesa (65,3 millones).
Pero la
mancha fiscal es mucho más amplia. Aparecen 4.510 personas jurídicas con una deuda de casi 15.000 millones de euros.
Tienen puestos destacados en la
lista negra de Hacienda la empresa de servicios financieros
Banreal Holding (98 millones), la
Organización Impulsora de Discapacitados (86,13 millones),
Petro-Nova Oil (82 millones) o las empresas cordobesas vinculadas al empresario
Rafael Gómez,
Sandokán:
Arenal 2000 (58 millones), Arenal 2001 (67 millones) y el Grupo Inversiones Arenal 2000 adeuda 48,6 millones.
También aparece el
Grupo Intereconomía, con una deuda de 10,23 millones, a través de las empresas
Intereconomía Corporación (7,3 millones) e
Intereconomía TV (2,9 millones). También aparece el Grupo Negocios de Ediciones y Publicaciones, con una deuda de 1,29 millones.
En fin, sigan buscando. Encontrarán muchos nombres y muchas empresas:
Pescanova,
Viajes Marsans, Grupo
Cantoblanco, vinculado al empresario madrileño
Arturo Fernández, sociedades de la familia
Ruiz-Mateos, como
Clesa; Fun & Basic; Volvoreta; Artesanos Camiseros; Jugueterías Poly o Merkamueble.
Rafael Esparza
rafael@hispanidad.com