- Las protestas contra la austeridad 'incendian' la inauguración de la sede del BCE.
- Mario Draghi lo ha celebrado con bellas palabras: "El edificio es un símbolo de lo mejor que Europa puede lograr junta, pero es también un símbolo de por qué no podemos arriesgar nunca de nuevo a separarnos".
- Pero el movimiento anticapitalista Blockupy ha protestado "contra el BCE que, como miembro de la troika, dificulta el trabajo del Gobierno griego" y contra "las políticas de austeridad".
Su presidente, Mario Draghi, lo ha celebrado con bellas palabras: "El edificio es un símbolo de lo mejor que Europa puede lograr junta pero es también un símbolo de por qué no podemos arriesgar nunca de nuevo a separarnos". La sede "proporciona un fundamento sano para que el BCE logre su mandato de estabilidad de precios para todos los ciudadanos de la zona euro". "El euro, nuestra moneda única, se ha convertido en el símbolo más tangible de la integración europea, una pieza de Europa accesible y valioso para todos nosotros", ha añadido.
En su discurso, además, el presidente del BCE ha tenido un recuerdo para las víctimas del holocausto nazi: "Entre 1941 y 1945, más de 10.000 judíos de Fráncfort y cercanías fueron deportados desde aquí a los campos de concentración. Se ha construido un monumento en memoria en la parte este del edificio para recordarnos, y a los que vengan después de nosotros, que los hechos nunca se pueden olvidar".
Pero la inauguración no ha gustado a todo el mundo. Grupos de manifestantes han protagonizado violentos enfrentamientos con los antidisturbios en protesta por el coste del edificio -1.300 millones de euros, un 30% más de lo presupuestado- y para reclamar el fin de las políticas de austeridad y más democracia frente a los mercados financieros. La policía ha retenido temporalmente a 350 personas y está a la espera de que sean trasladados o no a comisaría, según Efe.
La portavoz de la policía de Fráncfort Claudia Rogalski ha descrito la actitud de la multitud como "agresiva". "Hemos tenido lanzamientos de piedras, incendios de contenedores de basuras y siete coches policiales resultaron dañados", ha asegurado en declaraciones a la agencia Reuters.
El movimiento anticapitalista Blockupy había convocado para este miércoles una jornada de protesta: "Nuestra protesta es contra el BCE que, como miembro de la troika, dificulta el trabajo del Gobierno griego. Y no ha sido elegido democráticamente. Queremos que las políticas de austeridad terminen", ha asegurado Ulrich Wilken, uno de los organizadores, a la agencia Reuters, a quien había dicho que el movimiento quería "una protesta ruidosa pero pacífica".
Andrés Velázquez
andres@hispanidad.com