- Por cierto, cuando decimos que no es negocio hablamos tanto de banca de inversión como doméstica.
- La banca doméstica sólo será negocio si suben los tipos.
- Y la de inversión pone en solfa la doctrina imperante de que la solvencia bancaria se rige por los recursos propios.
Decíamos el miércoles que los resultados trimestrales de
JP Morgan marcaban el 'camino' al resto del sector. Esto es, menos ingresos y beneficios apoyados en atípicos. Este viernes analizamos otras dos entidades:
Goldman Sachs y
Citigroup.
Vamos con la primera,
Goldman Sachs, paradigma de banco de inversión. Durante el tercer trimestre los ingresos descendieron un 18% y no superaron los 6.861 millones de dólares (6.030 millones de euros), y los gastos cayeron un 5%, hasta los 4.815 millones de dólares (en euros, unos 4.230 millones).
Con esto, la entidad ha registrado un desplome de su beneficio, que ha caído un significativo 38% y se ha quedado en los 1.330 millones de dólares (1.160 millones de euros). En este caso, ni los atípicos han podido tirar de la cuenta hacia arriba.
Los números presentados por
Citigroup parecen muy distintos, pero es un efecto engañoso. El tercer banco norteamericano por volumen de activos gestionados ganó un 51% más de julio a septiembre, hasta los 4.291 millones de dólares (unos 3.760 millones de euros). ¿Dónde está el 'truco'? Es cierto que el banco ha recortado los gastos un 18%, pero esto no explica el aumento del 51% del beneficio. Sí lo hace, en cambio, el resultado comparado de 2014, cuando el banco hizo una provisión de 2.000 millones de dólares para hacer frente a las multas que se le venían encima. La evolución se ve más clara si tenemos en cuenta los resultados de los nueve primeros meses del año, en los que
Citigroup ganó un 5% menos que en 2014.
Como se ve,
Goldman y
Citigroup constatan que el negocio bancario ha dejado de ser negocio. Y nos referimos tanto a banca de inversión como a banca doméstica. Ésta, la minorista, sólo volverá a ser negocio cuando suban los tipos de interés. Mientras tanto, tendrá que conformarse con recorte de gastos, con la gestión de activos fuera de balance, etc.
Y los resultados de la banca de inversión pone en solfa la doctrina imperante de que un banco es más solvente cuanto más recursos propios tenga.
Pablo Ferrer
pablo@hispanidad.com