Nuevo mensaje de Santa María a la madrileña Margarita del Llano. Sí, no sean pesados, yo pertenezco a esos tipos raros que creen en la autenticidad -y en la profundidad- de esos mensajes. Pueden leerlos en https://vdcj.org/.   

Y el último tiene un especial interés porque dice, entre otras cosas, lo siguiente: “No estamos para pesimismos, desesperanzas... estamos los cristianos del mundo de hoy, para llenarlo de esperanza”.

En esta etapa de fin de ciclo pululan muchos falsos profetas. Algunos de ellos lo suficientemente inteligentes como para despistar. Pero también pululan los verdaderos, porque el conocimiento profético está más alto que nunca  cuando la Iglesia vive la que considero la mayor crisis de su historia. 

Pues bien, ahí tiene un termómetro seguro: si es augur de desgracias, probablemente se trate de un falso profeta. 

“El cristiano de hoy tiene que llenar de esperanza el mundo”. Pero cómo, ¿llenar de esperanza cuando estamos hablando del juicio de las naciones y del final de la historia (que no final del mundo)? Pues a lo mejor por eso. El primer mandamiento del siglo XXI ha pasado a ser la alegría, el buen humor, incluso el optimismo. El resto, del mal procede. Al menos, resulta sospechoso. 

Además, el lema del católico siempre es el mismo: de derrota en derrota hacia la victoria final

Todo un mensaje para el 2020. El de la Virgen, no el mío.