La Corte Suprema de México desestimó una demanda a favor del aborto respaldada por varias oficinas de la ONU. La demanda buscaba revocar las protecciones para los no nacidos en el estado de Veracruz, informa C-Fam.
No obstante, la Corte Suprema de México no se pronunció sobre el fondo del caso y lo desestimó por un tecnicismo y dejó abierta la posibilidad de que se ponga del lado de los grupos abortistas en el futuro. “Estoy de acuerdo en que los tratados internacionales son vinculantes para el Estado mexicano y buscan proteger a las mujeres y eliminar todas las formas de violencia”, explicó la jueza Norma Lucía Piña, quien escribió la opinión mayoritaria. Pero explicó que "no estamos tomando una decisión sobre el fondo, ni estamos en desacuerdo sobre la protección de la mujer".
La demanda alegaba que las protecciones legales para los niños en el útero son una forma de violencia de género y una violación del derecho internacional. La iniciativa fue respaldada por grupos internacionales de aborto y tres agencias de la ONU -ONU Mujeres, el Fondo de Población de la ONU y la agencia de la ONU para las drogas y el crimen- así como la oficina de derechos humanos de la ONU.
Las agencias de la ONU confirmaron su apoyo a la demanda a Friday Fax en 2018. Es muy probable que respaldar una demanda de este tipo viole una ley estadounidense que prohíbe a los destinatarios del dinero de los contribuyentes estadounidenses ejercer presión a favor o en contra del aborto.
Hace dos años, grupos de abortos mexicanos demandaron al gobierno de Veracruz para permitir el aborto a pedido en las primeras doce semanas de embarazo. Afirmaron que la legislatura estatal de Veracruz había "violado el derecho internacional" y "causado violencia contra las mujeres" al mantener el aborto fuera de un programa de violencia de género exigido a nivel nacional en 2016.
La demanda fue inicialmente exitosa. Un juez de un tribunal de distrito ordenó al estado de Veracruz legalizar el aborto en las primeras doce semanas de embarazo. El juez citó las opiniones no vinculantes de los organismos internacionales de derechos humanos, a pesar de que los acuerdos de la ONU reconocen el aborto como un tema exclusivamente nacional y los expertos internacionales disputan tales afirmaciones como infundadas .
Las tres agencias de la ONU y la oficina de derechos humanos de la ONU apoyaron públicamente la orden del juez de la corte de distrito a la legislatura de Veracruz en abril de 2018, poniendo el peso de todo el sistema de la ONU a favor de la despenalización del aborto.
La ideología de género y el aborto son las obsesiones del Nuevo Orden Mundial (uno de cuyos representantes es la ONU)
En un comunicado de prensa conjunto, las entidades de la ONU apoyaron la demanda del juez de que Veracruz “garantice” el acceso al aborto a mujeres y niñas como una forma de “apoyar los esfuerzos para mejorar y hacer realidad el derecho de las mujeres a la salud” con base en “estándares internacionales de derechos humanos.
Su declaración pudo haber violado una ley estadounidense conocida como la Enmienda Siljander. La enmienda Siljander prohíbe a los beneficiarios de ayuda exterior estadounidense, incluidas las agencias de la ONU, ejercer presión a favor o en contra del aborto. Las cuatro agencias reciben más de 200 millones de dólares de los contribuyentes estadounidenses anualmente.
“Agradecemos a Dios que la Corte Suprema preservó las protecciones legales para la vida humana en el útero”, decía una declaración de los obispos católicos de México publicada la semana pasada tras la decisión. La declaración de los obispos instó a las autoridades públicas y al pueblo de México a permanecer alerta en un momento de “grandes desafíos” y encomendaron al país a la protección de Nuestra Señora de Guadalupe.
Actualmente, solo 2 de los 32 estados mexicanos permiten el aborto a pedido en las primeras doce semanas de embarazo, y 17 estados protegen explícitamente a los niños "desde el momento de la concepción”.
Recordemos: la ideología de género y el aborto son las obsesiones del Nuevo Orden Mundial (uno de cuyos representantes es la ONU) y busca implantarlos en todo el mundo. Y ambas cosas, atentan contra la ley natural, pues todo el mundo sabe con la sola razón que se nace hombre o mujer y nadie nos pidió permiso para ello, como tampoco para nacer. Y todo el mundo puede saber con su sola razón que matar a un niño en el vientre de su madre es un asesinato.