Misas no, pero preparar el Ramadán, sí. Es lo que ha hecho la Policía Nacional, dependiente del Ministerio del Interior, durante esta Semana Santa. Curioso, porque, según el CIS, el porcentaje de católicos en nuestro país es del 67,4% (22,7% son practicantes y el 44,7%, no), mientras que los musulmanes apenas suponen el 4% de la población.

El caso es que, según cuenta Ok Diario, a la comunidad islámica de el Batán y de Talayuela, en Cáceres, sí se les permitió preparar el Ramadán, aunque eso implicara el desplazamiento de determinados musulmanes para comprar productos de cara al Ramadán que, ojo al dato, se celebra dentro de veinte días, el día 24.

Si todavía hay alguien que duda del carácter cristófobo del Gobierno Sánchez, aquí tiene otra prueba. La Guardia Civil también se ha hecho eco del asunto, concretamente la Asociación Profesional Unión de Guardias Civiles (UniónGC), a través de un comunicado, del que se ha hecho eco en Twitter el eurodiputado de Vox, Hermann Tertsch.

La UnionGC “ha mostrado su malestar por el trato de favor que están recibiendo los miembros de la comunidad musulmana durante el confinamiento, una opinión generalizada entre los miembros del cuerpo, incapaces de entender las últimas órdenes recibidas, que van en contra del estado de alarma por el Covid-19”.

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“UniónGC manifiesta su máximo respeto a la comunidad musulmana y a sus tradiciones y considera elogiable el deseo de pasar estar fechas con sus familiares y seres queridos, así como la costumbre de visitar los lugares de culto donde mostrar su fe, pero considera que va en contra de las medidas de restricción general de la población para evitar la propagación del coronavirus”, señala el comunicado.

Resumiendo: el Gobierno cristófobo de Pedro Sánchez no quiere que se celebren misas, pero sí el Ramadán.