Nokia ganó 263 millones de euros en el primer trimestre, frente a las pérdidas de 115 millones de hace un año.
La facturación alcanzó los 5.076 millones de euros en ese mismo periodo, un 3,3% más interanual.
La compañía finlandesa de telecomunicaciones destacó que la mejora de su rentabilidad se debió sobre todo al aumento de las ventas y los márgenes, especialmente en equipos de telefonía de quinta generación (5G).
Mobile Networks, el negocio de redes móviles de telecomunicación, facturó 2.262 millones de euros, un 3,5% menos que en el primer trimestre de 2020, aunque contabilizando sus ventas con tipos de cambio constantes, estas crecieron un 2%.
Su presidente, Pekka Lundmark, ha señalado que esperan que su estacionalidad habitual en los ingresos trimestrales "sea menos pronunciada en 2021".
Aún así, también ha destacado la escasez de chips, una situación que "continúan monitoreando", aunque hasta el momento Lundmark se ha mostrado "orgulloso de cómo hemos continuado entregando con éxito a nuestros clientes durante la escasez global de semiconductores".