Como se recordará, Podemos nació esgrimiendo que ellos no eran casta, que eran puros, que nunca iban a ser corruptos y que iban regenerar la vida política. Además, puso el listón ético contra la corrupción de los partidos muy alto. Pues bien: a día de hoy se acumulan los escándalos judiciales sobre su presunta corrupción.
Según informa El Mundo este lunes, el Servicio Ejecutivo de la Comisión de Prevención de Blanqueo de Capitales (Sepblac) remitió el pasado mayo un «informe de inteligencia financiera» a la Policía y a la Guardia Civil alertando de los vínculos entre Podemos y la empresa Neurona, que se encargó de la campaña electoral de la formación de Pablo Iglesias en las elecciones del 28 de abril de 2019. En concreto, el informe está fechado el pasado 25 de mayo y está registrado con el número 4048/2020.
El documento, con el sello de confidencial, explica que «la sociedad Neurona Comunidad, S.L., poco tiempo después de su constitución en marzo de 2019, recibió en una cuenta bancaria transferencias por importe total de unos 400.000 euros ordenadas por la Coalición Electoral Unidas Podemos Izquierda Unida, al parecer como pago por servicios en la campaña electoral», añade El Mundo.
Neurona está en el punto de mira judicial. En un duro informe del pasado 28 de julio, el Tribunal de Cuentas puso en tela de juicio la relación de Podemos y la consultora
Neurona está en el punto de mira judicial. En un duro informe del pasado 28 de julio, el Tribunal de Cuentas puso en tela de juicio la relación de Podemos y la consultora. Además de las posibles irregularidades en la constitución de la empresa en España, señaló que los 363.000 euros pagados no estaban debidamente justificados como gastos electorales, añade El Mundo.
No es este el primer documento que envía el Sepblac sobre los vínculos económicos sospechosos de Podemos. Como ya desveló El Mundo, al menos en tres ocasiones (2013, 2017 y 2018), alertó de los pagos que la productora en la que trabajaba Pablo Iglesias había recibido de empresas de dudosa procedencia y que estaban bajo sospecha de operaciones de blanqueo. Vinculaba ese dinero con Irán.
Además, el que fuera máximo responsable del equipo jurídico de Podemos, José Manuel Calvente, denunció la financiación ilegal de la formación de Pablo Iglesias a través de Neurona y los microcréditos. Calvente aseguró que «los contratos simulados» con Neurona servían para «financiar a partidos extranjeros y, posiblemente, también a Podemos, a través de microcréditos», recuerda el mismo medio.
Además, Calvente explicó al juez el pasado 29 de julio que la formación que preside Pablo Iglesias disponía de una caja B y pagaba sobresueldos a sus miembros de forma irregular. Afirmó que detectó la existencia de una «caja B que se nutría de donaciones» y que en una ocasión, ejemplificó, recibió la llamada de «una senadora» diciéndole que «había donado 2.000 euros al partido y que Hacienda le había comunicado que el partido había declarado 5.000 euros». Por lo que advirtió que Podemos podía estar blanqueando dinero en efectivo de origen desconocido y alertó de que ese tipo de prácticas eran «muy graves» y estaban completamente prohibidas, según informaron El Mundo y La Razón.
Y para más inri, Podemos inventó el acoso sexual a Marta Flor para justificar el despido de Calvente.
Y no hay que olvidar el caso Dina y la intención del juez García-Castellón de elevar la causa al Tribunal Supremo.