- El ingreso medio por turista en 2010 era de 816 euros. En 2015 ha sido de 741.
- Lo mejor: los españoles volvemos a viajar.
- Y repunta, por fin, el turismo de negocios.
- Pero cuidado, si en seis meses no hay un gobierno estable el sector perderá 900 millones de euros.
El año 2015 ha sido, en general, muy bueno para el turismo en España. Los
datos publicados este martes por Exceltur así lo atestiguan: el PIB turístico cerró el ejercicio con un crecimiento del 3,7%, tres décimas más que en 2014 y muy cerca del ritmo de crecimiento registrado en 2006 ( 3,8%).
Este aumento se ha concretado en una mejora considerable de las ventas y los resultados de las empresas turísticas españolas. El 84,7% de ellas han aumentado sus ventas y el 83,4% han registrado una notable mejoría de los márgenes y de la cuenta de resultados. No se veía una mejora tan significativa desde el año 2002.
Durante su intervención ante los medios, el vicepresidente ejecutivo de
Exceltur,
José Luis Zoreda (
en la imagen), ha resaltado que esta mejoría se debe, fundamentalmente, al aumento del
turismo nacional y a la fuerte recuperación del turismo de negocios. Sobre el primero, sólo una salvedad a la que volveremos más adelante: en los dos últimos meses del año, esa demanda nacional se ha desacelerado de manera notable por culpa del retraso en el lanzamiento del programa de viajes del Inserso, por los atentados de París, que frenaron algunas escapadas al extranjero, y por la celebración de las elecciones generales.
En cuanto al
turismo de negocios, efectivamente ha logrado repuntar (un 11,3% entre febrero y septiembre) gracias a la mejora económica de las empresas, tanto españolas como extranjeras. Y el turismo de negocios es positivo, entre otras cosas, porque aporta más ingresos a las arcas del sector –el gasto medio diario por turista es de 164,5 euros- que el turismo de ocio –el gasto medio diario es de 98,3 euros-.
Todo esto está muy bien y lo celebramos. Ahora bien, el turismo en España tiene una asignatura pendiente. Y no es una cuestión menor: el
gasto de los turistas extranjeros sigue cayendo. En otras palabras: España sigue batiendo récords de turistas –algo que gusta mucho en el ministerio de Industria, Energía y Turismo que sigue liderando, en funciones,
José Miguel Soria- pero son turistas que cada vez dejan menos dinero y, en algunos casos incluso, provocan problemas de convivencia.
Concretamente, cada visitante extranjero gastó en 2015, de media,
741 euros, un 1% menos que en 2014, porcentaje que se eleva al 2,1% si descontamos la inflación. Para que se hagan una idea, en el año 2000 el gasto era de
1.108 euros. Sin duda, una de las causas de esta caída ha sido el crecimiento desbordado de la competencia irregular de servicios turísticos, que ofrece 2,7 millones de plazas frente a las 2,4 millones regladas en toda España. No en vano, la regulación de este tipo de establecimientos será una de las reivindicaciones que el sector traslade al nuevo Gobierno.
Precisamente, una de las cuestiones que trae de cabeza a
Exceltur es la formación del nuevo Ejecutivo. Para
Zoreda es fundamental que el Gobierno se elija pronto y que sea estable y fuerte, más allá de su signo político. El asunto es de vital importancia para el desarrollo del sector en 2016. Las previsiones son elocuentes: si el Gobierno cumple estas premisas, el turismo crecerá un 3,4% este año, pero si en seis meses no tenemos un Ejecutivo de estas características, el crecimiento será solo del 2,7%. La diferencia es importante: 900 millones de euros que dejará de ingresar el sector en nuestro país.
Pablo Ferrer
pablo@hispanidad.com