Pedro Sánchez es uno de los líderes que más ha tardado en aparecer tras conocer el resultado de las elecciones. Comienza su discurso con alegría "hemos hecho que pase", afirmaba, "ha ganado el futuro y ha perdido el pasado". "Se ha demostrado que esta es una gran democracia", comentaba al resaltar la cantidad de votos que se ha llevado su partido.
Sin dejar el lenguaje inclusivo de lado -"amigos y amigas"- el presidente respondía que "me ha quedado bastante claro" en respuesta al griterío de la multitud: "con Rivera no". "No queremos la involución, queremos un país que avance, que mire al futuro", conseguía decir mientras el gentío elevaba el tono con un "no pasarán". Poco después, sentenciaba: "Hemos ganado las elecciones y vamos a gobernar España". Por fin, finaliza destacando que formará un gobierno proeuropeo, sin olvidar que "nos queda el 26 de mayo".
"El resultado ha sido muy malo", afirma Pablo Casado
Malos resultados para el Partido Popular, que afronta una gran caída: de 137 escaños pasa a 66. Antes de terminar el escrutinio, Teodoro García Egea dejaba claro que "la mejor encuesta que podemos valorar es la de las urnas", a lo que añadía que "vamos a seguir trabajando por España y esperamos que los españoles nos sigan dando su confianza".
Pablo Casado también se hace esperar y comienza su discurso insistiendo en que el PP es el "el partido líder de la oposición". "El resultado ha sido muy malo", afirma, "nos vamos a poner a trabajar desde ahora liderando el espacio del centro derecha". "El tiempo nos ha dado la razón", explica al desarrollar que la fragmentación del voto de la derecha ha supuesto la victoria electoral de la izquierda. El líder de los populares se despide con un mensaje de esperanza ante las elecciones del 26 de mayo: la derecha tiene que unirse, repite, dejando caer que "seguimos siendo la mejor opción".
Albert Rivera se presenta como posible líder de la oposición
Por su parte, Albert Rivera (Ciudadanos) felicitaba a los ganadores de las elecciones: "los demócratas respetamos, los liberales respetamos". Al poco, daba dos noticias: Sánchez pactará con Podemos y con los independentistas, y, por otro lado, señala a su partido como "la esperanza y la ilusión de España gracias a los más que cuatro millones que nos habéis dado vuestro voto". Advierte que "vamos a vigilar muy de cerca" a los que gobiernan. "Hemos dado un salto cuantitativo para liderar la oposición", comentaba.
Pablo Iglesias aparecía poco antes de terminar el escrutinio. Tras dejar claro que "nos hubiera gustado tener un resultado mejor", afirma que "el peso parlamentario del bloque progresista supera al peso parlamentario del bloque de la derecha", lo que clasifica como una victoria. Además, declaraba que "quien no entienda que España es plurinacional, sencillamente no entiende a España". Haciendo crítica, achaca el resultado a "dar una imagen de nuestra situación interna que no ha estado a la altura". "Las elecciones no van tanto de ganar, sino de sumar", concluye. Por otro lado, Alberto Garzón mandaba un mensaje al PSOE: "Creemos que Pedro Sánchez debe evitar la tentación naranja".
Al igual que los votantes en Ferraz, Garzón le señala a Sánchez que "debe evitar la tentación naranja"
Santiago Abascal ha sido el primero en hablar ante los simpatizantes de su partido, en un discurso en el que destacaba que "hemos cumplido con nuestra obligación y que gracias a eso habrá una voz en el Congreso". "Nosotros hemos venido a lanzar un mensaje de unidad nacional que contrasta con el de los demás de partidos", añadía el líder. Asimismo, se ha referido en varias ocasiones a la "derechita cobarde", prediciendo las explicaciones de los populares sobre la pérdida de la derecha: "aquí la única responsabilidad" es de ellos, comentaba aludiendo a la fragmentación del voto como excusa de la pérdida de poder en el Congreso por parte de la derecha. "24 diputados defenderán el derecho a la vida en las cortes", anunciaba. "Bienvenidos a la resistencia".
Mientras, Gabriel Rufián (ERC) comenzaba su discurso felicitando a Meritxell Batet: "Habéis ganado estas elecciones generales a vuestros carceleros". A continuación, afirmaba que "Cataluña combate y destruye" al fascismo. Asimismo, recordaba que "mañana seguirá habiendo nueve demócratas en la cárcel" y comentaba celebrar "la primera de muchas victorias".
Ya es oficial: el feminismo ha llegado para quedarse, la cristofobia también.