Este lunes, la ministra de Trabajo, Magdalena Valerio, ha recordado el plan de ampliar el permiso de paternidad anunciado en octubre… para avanzar hacia la equiparación con el de maternidad. Además, ha insistido en que es un “factor decisivo para eliminar la segregación en el empleo por razón de género”. Pero con razones tan profundas, cabe preguntar ¿por qué no lo equiparan ya?
‼️ En 2019 el permiso por paternidad será de 8 semanas, 3 más que ahora. Avanzamos hacia la equiparación con el permiso por maternidad, factor decisivo para eliminar la segregación en el empleo por razón de género, #EPDesayunoValerio pic.twitter.com/vEBWXiScq1
— Ministerio Trabajo, Migraciones y Seguridad Social (@empleogob) 26 de noviembre de 2018
Y es que tras el acuerdo presupuestario alcanzado por Unidos Podemos, el permiso de paternidad pasaría de las cinco semanas actuales a ocho en 2019, después a doce en 2020 y se igualaría con el de maternidad (16 semanas) ¡en 2021! Una equiparación progresiva que no se entiende si Valerio y compañía tienen tantas ganas de poner fin a la supuesta segregación laboral por razón de género. Dejando a un lado que quizás deben igualar otras cosas más importantes, pues los padres no pueden dar de mamar, por ejemplo. Y todo ello, sin olvidar que los grandes problemas del Ministerio de Trabajo son el paro y las pensiones.
Es una equiparación progresiva: de cinco a ocho semanas, luego a doce y por fin, ¡en 2021! a 16 semanas, como las mamás
Eso sí, conviene recordar que el aumento del permiso de paternidad forma parte de los Presupuestos de 2019 y que si estos no se pueden aprobar (lo que constituye el ‘plan A’) por falta de apoyos, habrá que pasar al ‘plan B’. Es decir, el Gobierno Sánchez aprobará toda una batería de medidas (SMI, pensiones, permiso de paternidad…) vía decreto ley.