- Si no lo consigue, habrá que ir al troceo total y el Popular desaparecería.
- Aunque la tercera solución sería la absorción pura y dura por otro operador.
- Tanto el BCE como el Gobierno le han dado un plazo de 1 año para enajenar activos y regularizar los recursos propios.
- Y a las ventas previstas (Portugal, EEUU, etc.) podría unirse el antiguo Banco Pastor, con ficha bancaria anexa.
- Mientras, con el divorcio entre Europea de Inversiones (UEI) y el Popular termina la era Luis Valls.
El lunes 10 de abril el Banco Popular celebra Junta General de Accionistas. Su nuevo presidente,
Emilio Saracho (
en la imagen), deberá entonces plantear su estrategia a los propietarios. En ello está. Y
la palabra clave es una no especialmente eufónica: troceo.
Posibilidad primera:
la que desea Saracho que, en contra de lo que se ha repetido, quiere mantener la marca
Banco Popular y no está por la venta. Esta posibilidad consiste en vender activos a los tres grandes bancos (
Santander, BBVA y Popular) con el respaldo del Gobierno español y del
BCE. Con esto se conseguiría que no hubiera abusos en la negociación.
En su momento, Hispanidad ya adelantó los activos disponibles para la venta: Portugal, EEUU, México y, si fuera el caso,
incluso parte de sus sucursales. Añadan a esto la posibilidad de segregar el antiguo
Banco Pastor, que posee ficha, que estaba centrado en Galicia y Castilla-León.
Saracho tiene un año para poner en marcha su plan. El ministro
Guindos le apoya y el BCE le ha dado el actual ejercicio para plantear, tras todas esas ventas,
un plan de recursos propios adecuado. Y, por supuesto, para aclarar los activos inmobiliarios dañados, que constituyen la clave de todo el saneamiento.
Ahora bien, si el plan falla, la alternativa sería un troceo total, con la descripción de la marca popular o sencillamente la venta a un tercero.
Nadie quiere la alternativa y
Saracho se está centrando en la primera solución. Que el
Banco Popular permanezca.
Al mismo tiempo, con el divorcio entre Europea de Inversores (UEI) y el Popular se cierra la etapa
Luis Valls, que le lleva a ser el banco más rentable del mundo. UEI agrupa
a las familias accionistas que constituyeron el soporte de referencia del Popular. Superan el 1% del capital de la entidad, sí, pero es que llegaron a tener el 5% y, además, fueron, y aún lo son, el núcleo duro de la Sindicatura. Esto es, que aún 'poseen' el 9%. Sin UEI
nada volverá a ser igual en el Popu. Pero
Emilio Saracho, conste en acta, quiere mantener el Popular independiente. Sólo que un tanto jibarizado.
Eulogio López
eulogio@hispanidad.com