• Y encima deberá compartir la dotación con la lucha contra la pobreza infantil.
  • El Gobierno sigue sin incentivar la natalidad… debería imitar a Alemania, que da 184 euros/mes por niño.
  • Prefiere pasar de la crisis demográfica, aunque garantiza que las pensiones se van a pagar en plazo y sin elevar la deuda pública.
  • Los ingresos tributarios ascenderán a 200.963 millones, como estaban en 2007, mientras se congelará el gasto, manteniendo el social.
  • Eso sí, no habrá impuesto a bebidas azucaradas (no se descarta, pero por ahora sólo se estudia) ni nuevos tributos verdes (se reservan a CCAA).
  • E intentan contentar a todos: más dinero ( 5.387 millones) para autonomías, Justicia, Dependencia, Educación, Empleo, I D i…
Este viernes, el protagonista del Consejo de Ministros ha sido el proyecto de ley de Presupuestos Generales del Estado (PGE) para 2017. Con mucho retraso, como saben, pues estamos acabando marzo. Pero este es sólo el principio, ahora queda toda la tramitación parlamentaria… Tranquilos, no ha habido muchas sorpresas porque la familia vuelve a ser la gran olvidada: sólo contará con 342 millones de euros. Y encima deberá compartir dicha dotación con la lucha contra la pobreza infantil. Vamos que el Gobierno sigue sin incentivar la natalidad… debería imitar a Alemania, que da 184 euros/mes por niño hasta que este acaba su formación profesional o universitaria. Pero no, España tan sólo da 100 euros/mes a las madres trabajadoras durante los tres primeros años y luego un complemento en la pensión de jubilación. Mariano Rajoy y compañía prefieren pasar de la crisis demográfica, aunque garantizan una y otra vez que las pensiones se van a pagar. El último en hacerlo ha sido el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, que ha afirmado que se van a pagar "en plazo y sin elevar la deuda pública". El Gobierno prevé que los ingresos tributarios asciendan a 200.963 millones, la misma cifra que tenían las administraciones públicas hace una década y un 7,9% más respecto a 2016. Y es que tras la bajada de impuestos en los dos últimos años (-12.300 millones) por la reforma tributaria, que ha provocado "buena parte del crecimiento y explica la evolución de la recaudación". No habrá más modificaciones del Impuesto de Sociedades, aunque sí se aplicará un IVA del 10% (en lugar del actual 21%) a los espectáculos en vivo y en directo, como pidió Ciudadanos en su pacto de legislatura. Claro que esto último no afectará al cine, que ya cuenta con 70 millones más en su nueva ley de financiación, ha explicado el portavoz del Gobierno y ministro de Educación, Cultura y Deporte, Íñigo Méndez de Vigo. "Cuando el cumplimiento del déficit lo permita, bajará", ha añadido. Eso sí, no habrá impuesto a bebidas azucaradas, como se contemplaba en el plan de diciembre remitido a Bruselas. Aunque no se descarta, por ahora sólo se estudia su viabilidad. Montoro ha cedido… y ha desvelado que la Federación Española de Industrias de Alimentación y Bebidas (FIAB) le mostró su preocupación porque se aplicara de forma más agresiva en las autonomías. Respecto a los nuevos tributos verdes, Montoro se los ha reservado a las CCAA. Mientras, el Gobierno congelará el gasto, que será 187 millones inferior al de 2016, pero mantendrá el gasto social. E intentará contentar a todos: más dinero ( 5.387 millones) para autonomías, Justicia ( 7,6%), Dependencia ( 100 millones), Educación ( 1,7%), Empleo ( 5,5%), I D i ( 4,1%)… Cristina Martín cristina@hispanidad.com