La noticia es que Miguel Barroso entra en el Consejo de Telefónica y que salen de su Consejo editorial Felipe González y Augusto Delkáder, el eterno número dos del también defenestrado Juan Luis Cebrián. El felipismo ha muerto, viva el zapaterismo, el que iniciara el guerracivilismo en España y viva el Sanchismo, el que convirtiera ese guerracivilismo en frentepopulismo. Ya saben: el único remedio contra el rencor es la amnesia.
Pero la entrada de Miguel Barroso, ex secretario de Estado de Comunicación con Zapatero y viudo de la exministra Carmen Chacón, el hombre para España del masoncete Martin Sorrell, el más poderoso ejecutivo mundial de la publicidad, supone que muy cerca anda el otro miembro del dúo 'los Migueles': José Miguel Contreras, hacedor de La Sexta y antiguo asesor de imagen de Zapatero.
Ambos quieren aprovechar que Joseph Oughourlian ha conseguido la Presidencia de Prisa para crear una nueva televisión, que desean suya: Prisa TV.
Y esto es bello e instructivo, porque 'los Migueles' pretenden poner en marcha Prisa TV pero con el dinero de Telefónica.
Sí, Telefónica posee la plataforma Movistar+ y, además, es accionista de Prisa. Ahora bien, ¿qué tiene que ver una cosa con otra?
Y los más enfadados son la competencia progre: por ejemplo, Ferreras y La Sexta o Vasile, de Tele 5
Naturalmente, el presidente José María Álvarez Pallete, según aseguran a Hispanidad fuentes de la compañía, no tiene la menor intención de regalar a los Migueles su plataforma para que hagan su TV zapaterista.
Ya se lo dijo el pasado año, cuando intentaron lo mismo, como adelantó Hispanidad. ¿Que quieren hacer una TV a mayor gloria de ZP y del Gobierno Sánchez? Estupendo, pero Telefónica no va a correr con los gastos. Además, Telefónica aseguran en la compañía, quiere una TV de entretenimiento no de información política.
Sólo hay un problema, el jefe del PSOE en la operadora, el consejero Javier de Paz, íntimo de Rodríguez Zapatero, apoya la opción de los Migueles. En ese sentido, el enemigo está dentro.
Y los más enfadados de todos son los de la competencia progre: por ejemplo, Ferreras y La Sexta o Vasile y Tele 5. Hay demasiadas teles progres y el pastel publicitario puede no dar para tanto.
El problema es que el consejero de Telefónica Javier de Paz aprueba el proyecto Prisa-TV a mayor gloria de su amigo Zapatero y del Sanchismo
Por último, reseñar el triste espectáculo de un Joseph Oughourlian que con tal de ser presidente está dispuesto a serlo de un grupo quebrado, cuyos dos principales ejes, el diario vegetal El País y la Ser influyen cada vez menos: más la segunda que el primero, ciertamente.
Por eso, los nuevos dueños de Prisa se arrojan en manos del medio más frívolo pero más poderoso del momento: la caja tonta, también conocida como monigotera.