Prosegur ganó 118 millones de euros hasta septiembre, un 23,9% menos que en el mismo periodo de 2018.
Las ventas llegaron a los 3.098 millones de euros, un 9,5% más.
Mientras que el resultado bruto de explotación (Ebitda) aumentó un 14%, hasta alcanzar los 378 millones.
Respecto a la deuda financiera neta del grupo, esta creció en los nueve primeros meses en 178 millones de euros (excluyendo el impacto de la norma IAS 16) como consecuencia principalmente de las operaciones de crecimiento inorgánico.
"Prosegur está operando en un entorno macroeconómico complejo. A pesar de la devaluación adicional de las principales divisas en las que opera el grupo y del coste de las integraciones de las adquisiciones realizadas, el comportamiento positivo de los negocios ha permitido la protección de la rentabilidad en el periodo”, ha explicado la empresa.