Se reaviva el fuego en el incendio del vertedero vizcaíno de Zaldibar. Los residuos volvieron a prender durante la noche del 20 al 21 de febrero, revelando la gravedad de una crisis medioambiental que afecta directamente a las más de 50.000 personas que residen en esta zona de la provincia de Vizcaya, en el País Vasco, informa Sputnik.
Se da la circunstancia de que las autoridades peneuvistas del Gobierno vasco habían levantado las medidas preventivas para proteger a la población una vez obtuvieron del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) el resultado de las muestras recogidas entre el 10 y el 16 de febrero, que marcaban un descenso de los niveles de dioxinas y furanos, substancias tóxicas ambas muy perniciosas para la salud.
"Se ha reactivado el foco y el retén consistente en maquinarias que tienen que echar tierra para ahogar el fuego tienen difícil trabajar en las condiciones de inestabilidad y de noche", dijo Juan Carlos Abascal, alcalde de la localidad de Ermua, la más próxima al vertedero.
Recordemos que esta crisis estalló a principios de febrero, cuando el desplome de miles de toneladas de residuos provocó además la desaparición de dos operarios, cuyos cuerpos no ha sido posible recuperar toda vez que los equipos de rescate detectaran altos niveles de amianto, suspendiéndose las tareas de búsqueda.
El Gobierno autonómico vasco, liderado por el Partido Nacionalista Vasco (PNV), que está siendo muy criticado por su nefasta gestión medioambiental y por la falta de transparencia e información a la población, tiene ante sí la celebración de unas elecciones al Parlamento vasco el próximo 5 de abril que pueden pasarle factura política.