Poco más de un mes después de que Acciona lanzara una OPA sobre Nordex, la gran pregunta es quién manda sobre este fabricante alemán de turbinas eólicas. A simple vista, parece que la compañía que dirigen los Entrecanales, que es el primer accionista, es la que trabaja y se encarga de la gestión del día a día, mientras la familia Quandt es la que decide, pero lo hace con sólo poseer un 5,7% del capital.
Los alemanes Jan Klatten (exmarido de Susanne Quandt) y Wolfang Ziebart, y el español Juan Muro-Lara están en el Comité Ejecutivo del Consejo, el verdadero órgano de decisión
No estamos hablando de una familia cualquiera, sino de la más rica de toda Alemania. En febrero del año pasado, los hermanos Stefan y Susanne, hijos del matrimonio formado por Herbert y Johanna Quandt -ya fallecidos-, se repartieron la herencia familiar: él se quedó con el 25,8% de BMW y ella con un 20,9%, pero esta última también controla el holding familiar (Skion) que tiene participaciones en varias empresas (el 100% de la química Altana y el 5,7% de Nordex, entre ellas). De hecho, en esta última compañía, los Quandt tienen un gran poder pese a su participación minoritaria, pues dos de los tres puestos que hay en el Comité Ejecutivo del Consejo de Supervisión son alemanes:
- el exmarido de Susanne, el ingeniero Jan Klatten, con el que no ha roto relaciones empresariales y que además es presidente del Comité de Estrategia y Tecnología
- Wolfang Ziebart, un ingeniero y ejecutivo alemán de la industria automovilística que ha trabajado en BMW, en el fabricante de coches deportivos germano Artega Automobiles y en la multinacional británica de coches Jaguar Land Rover. Preside el Consejo de Supervisión, así como el Comité Ejecutivo de este órgano y es miembro del Comité de Estrategia y Tecnología
- el tercero es el español Juan Muro-Lara: vicepresidente del Consejo de Supervisión y miembro del Comité de Auditoría de Nordex, así como jefe de Desarrollo Corporativo y oficial de Relaciones con Inversores de Acciona
El resto del Consejo de Supervisión del fabricante alemán de turbinas eólicas lo forman: la ex comisaria europea del Clima, la danesa Connie Hedegaard; el alemán Martin Rey, accionista gerente de la empresa germana de servicios y de consultoria Maroban; y el español Rafael Mateo, CEO de Acciona Energía. Y tras hablar de este órgano de decisión, cabe mencionar que la alta dirección está formada por: los españoles José Luis Blanco y Patxi Landa, que son CEO y director de ventas respectivamente y proceden de la antigua Acciona Windpower; y el alemán Christoph Burkhard, director financiero.
Junto al Consejo de Supervisión, la alta dirección está formada por los españoles José Luis Blanco (CEO) y Patxi Landa (director de ventas), y el alemán Christoph Burkhard (director financiero)
Paralelamente, el regulador bursátil alemán ha autorizado la OPA de Acciona sobre Nordex, una operación que no parece que vaya a tener éxito, según el departamento de análisis de Banco Sabadell. ¿El motivo? Su precio es bajo (10,34 euros por acción) e inferior a la actual cotización de la empresa de turbinas eólicas (12,84).
Un movimiento que se debió que Nordex necesitaba una inyección de liquidez para poder hacer frente al desarrollo del plan de negocio, explican los citados analistas. Por eso Acciona lanzó una ampliación de capital por 99 millones de euros, elevando así su participación del 29,9% al 36,27%. Y al traspasar el umbral del 30%, se vio obligada a lanzar una OPA, es decir, esta fue sobrevenida, pues si quisiera hacerse con el 100% la habría lanzado a un precio mayor. También la gestora de fondos DWS subió su participación del 3% al 5, mientras los Quandt han mantenido su 5,7%.
Nordex necesitaba liquidez... y Acciona lanzó una ampliación de capital, que conllevó una OPA sobrevenida: esta no tendrá éxito dado su bajo precio
Tras esta operación, Nordex “mejora su solvencia y liquidez, y envía una fuerte señal de confianza a clientes, proveedores y bancos”, como se recogía en la presentación enviada a la CNMV. Algo que necesitaba para ejecutar su creciente cartera de pedidos ante un contexto de mercado volátil a corto plazo después de la quiebra de Senvion, otro fabricante alemán de turbinas eólicas.