- La petrolera y la constructora suben un 1% en bolsa con un Ibex entre plano y bajista.
- Eso sí, el dividendo total de Repsol para 2016 sigue donde estaba, 0,8 euros por acción.
- Sacyr ha reducido mucho el riesgo vinculado a su 8,5% en Repsol y está en pista de salida.
- Imaz despeja dudas... y el dividendo es una buena herramienta en la reconversión de Sacyr.
Repsol sube con un
Ibex a la baja, tras el anuncio de un dividendo complementario de 0,45 euros, y el gesto se traslada también a la cotización de
Sacyr, que mantiene un 8,4% en la petrolera. Una cosa lleva a la otra. La constructora sube un 2%, hasta 2,37 euros, y Repsol algo menos (1,46%), hasta 14,6 euros, con la bolsa entre plana y bajista aunque ha terminado al alza ( 0,3%).
El
dividendo para el conjunto de 2016 se mantiene en 0,8 euros, igual que en 2015. La compañía pagará un
complementario de 0,45 euros en formato
scrip, un 28,5% más respecto a los 0,35 de enero. Algunos analistas habían previsto, sin embargo, que el complementario fuera algo más bajo, en torno a 0,40-0,41 euros, y eso, en lógica, lo traduce la bolsa.
El efecto es claro, a su vez, en Sacyr, que preside
Manuel Manrique (
en la imagen). La acción cotiza a 14,6 euros y su participación en libros está valorada a 15,6 euros por título. Si la acción llega a 15,7
podría vender, del mismo modo que
Caixabank.
El riesgo vinculado a Repsol ha sido uno de los motivos de la presión bajista en bolsa, aunque las circunstancias, como se vio en los
resultados de 2016, han cambiado. Las
minusvalías latentes se han reducido hasta 148 millones, aunque llegaron a alcanzar los 680 millones. Pero todo hay que decirlo: Sacyr ganó 120,24 millones y había cobrado 197 millones por dividendo de la petrolera.
Repsol, por tanto, cumple, y Sacyr recoge el eco. No obstante, el dividendo de la petrolera sigue por 20 céntimos por debajo de lo anunciado por su consejero delegado,
Josu Jon Imaz (
en la imagen),
cuando presentó el plan estratégico 2016-2020. Dijo que mantendría el dividendo de un euro (con la fórmula de
scrip dividend, opción entre efectivo y acciones) y que incluso podría crecer más, aunque matizando que siempre de la mejora del negocio.
La situación de la petrolera, ha cambiado mejor desde entonces. Hoy vive un momento dulce en beneficios, que ya adelantó su
despegue en bolsa.
Imaz preparó Repsol para un petróleo a 40 dólares en 2015 y ha logrado conducir desde entonces la compañía, sin sobresaltos ni en los resultados ni en el dividendo, y todo lo que suba el barril de
petróleo a partir de ahí, por tanto, es miel sobre hojuelas para el grupo.
Rafael Esparza