Repsol prevé que la digitalización le aportará beneficios de 300 millones anuales en 2019 y 2020, que aumentará a 1.000 millones en 2022, no sólo por los nuevos ingresos, también por la optimización de inversiones y gastos.
El grupo desglosa los efectos de su programa de digitalización, incluido en la actualización del plan estratégico, presentado en junio de 2018. Ha puesto en marcha, en concreto unas 130 iniciativas, a las que ha destinado 70 millones en 2018 y prevé otros 150 este año (220 millones en total).
Esos proyectos han implicado a 1.000 profesionales y afectan a todas las unidades de negocio, dentro de una transformación de sector energético para mejorar los recursos.
La inversión en dos años suma 220 millones con avances en robotización en las plantas industriales
Repsol destaca cuatro campos en esas iniciativas: por un lado, la robotización, con el objetivo de reducir el tiempo a tareas repetitivas, y la mejora en la operación y mantenimiento de las instalaciones industriales. Ha iniciado pruebas en ese sentido en las plantas de Puertollano y Cartagena, que ha ampliados a otros complejos de refino, química y de GLP.
Por otro lado, trabaja también en incorporación de centros de control remoto en el negocio de Exploración y Producción (upstream), que ya ha probado en activos del Reino Unido, y la app Waylet, para los sistemas de pago en el área comercial.
En esas iniciativas, Repsol cuenta con más de 40 proveedores, que van desde Accenture o IBM a compañías especializadas en áreas, como Turing, Kabel o Conento, startups como Finboot, o grandes tecnológicas como Google o Microsoft.