En la soleada tarde del 5 de mayo, el grupo Endesa ha publicado sus resultados del primer trimestre de 2021. Antes de comenzar con el análisis de las principales magnitudes que componen la cuenta de resultados nos adentraremos en el maravilloso mundo bursátil para ver cómo ha acabado la sesión Endesa, con el objetivo de ver cómo afecta al precio de cotización del grupo la bondad de sus resultados publicados a cierre del día. Desde el 27 de abril de 2021 hasta el 4 de mayo, el precio de la acción de Endesa ha seguido una senda descendente, observándose un único incremento intradía el 3 de mayo de un pequeño porcentaje del 0,55%. Sin embargo, el grupo ha obtenido en el 5 de mayo un incremento del 1,56%, desde el precio de cierre del día anterior: de 21,8 euros (€) al precio a 22,14€. Y este jueves ha empezado bajando un 1%, aunque el descenso pronto se ha rebajado al -0,7%.
Los ingresos de Endesa a nivel consolidado del primer trimestre han disminuido en un 1,5% respecto al mismo periodo de 2020, a 4.993 millones de euros (M€). Dicho decremento en la facturación del grupo se ha visto reflejado sobremanera en la variación interanual del Ebitda, capacidad de generar recursos del grupo, lo que denota que además de que Endesa ha recibido menos ingresos, no ha realizado una buena gestión de sus recursos. El Ebitda reportado del grupo en el primer trimestre se ha situado en 1.019M€, la “friolera” de un 31% inferior a la misma cifra de hace un año, que fue de 1.476M€. Estos decrementos en términos relativos entre períodos son cada vez mayores a medida que avanzamos en la cuenta de resultados, por ejemplo el descenso interanual de la cifra de Ebit, Ebitda menos amortizaciones y depreciaciones, ha sido del 45%, hasta los 615M€. Un desastre.
Desde el 27 de abril hasta el 4 de mayo, el precio de la acción de Endesa ha seguido una senda descendente, observándose un único incremento intradía el 3 de mayo de un pequeño porcentaje del 0,55%
Finalmente llegamos a la cifra de resultado neto de Endesa, donde no encontramos sorpresas a tenor de las anteriores cifras. El resultado neto reportado del grupo ha sido inferior entre el primer trimestre de 2021 y el primer trimestre de 2020 en un 41,8%, pasando de 844M€ a ser de 491M€.
No nos echemos a temblar todavía, seguro que sacamos algo positivo de la cuenta de resultados. Estamos de suerte, el grupo ha aumentado su flujo libre de caja en un 168% desde el primer trimestre de 2020 al mismo periodo de 2021, pasando de ser negativo de 232M€ a ser positivo de 158M€. El origen de este incremento se debe principalmente a un aumento del flujo operativo de caja del 111% entre períodos y un aumento del 71% del capital circulante.
No ha realizado una buena gestión de sus recursos: el Ebitda es de 1.019M€, la “friolera” de un 31% inferior al de hace un año, y el Ebit se ha desplomado un 45%
Respecto a la deuda neta en el primer trimestre de 2021, esta ha aumentado en un 8,7% en comparación con el cierre de 2020, hasta los 7.496M€.
Como conclusión sobre Endesa, el grupo ha reducido considerablemente su resultado neto reportado en el primer trimestre en un 41,8%. Cifra que sumada a la reducción de ingresos, del Ebitda y del aumento de la deuda, en iguales términos comparativos, no nos ha dejado un buen sabor de boca sobre la evolución futura del grupo de manera comparativa con las mismas cifras del ejercicio anterior, aunque por ahora mantiene sus previsiones. La única bondad de los resultados del primer trimestre, respecto al mismo período del año anterior, radica en que ha aumentado sobremanera su flujo libre de caja, bueno al menos cuando esté endeudado “hasta las cejas” dispondrá de efectivo para pagar,... o eso esperamos.