- Lo más curioso: en AENA parece que no le salían las cuentas porque se retiraron cuando el Gobierno cerró el 'chollo Vargas'.
- El Ceo de la multinacional dice que "siempre será un activo interesante", pero que está "fuera de la estrategia de inversión" a corto plazo y augura su privatización total.
- Para optar a la liberalización del AVE y competir con Renfe, los Del Pino se han aliado con los británicos de First Group.
- Busca crecer en sus mercados estratégicos (Norteamérica, Hispanoamérica y Australia), a la vez que entrar en México, donde pujará por el nuevo aeropuerto azteca.
- En cuanto a los resultados, son buenos, pero la deuda aumenta un 16,4% hasta los 6.230 millones de euros.
En la tarde del pasado martes, Ferrovial presentó sus resultados correspondientes a 2014, pero las declaraciones de su consejero delegado, Íñigo Meirás (en la imagen junto a Rafael del Pino), han ido mucho más allá de los números. En concreto, ha dado algunos recaditos a la ministra de Fomento, Ana Pastor, sobre algunos espinosos asuntos de su cartera: radiales, liberalización del AVE y privatización de AENA.
En relación a las radiales, Meirás ha optado por presionar a Pastor. El Ceo del grupo de infraestructuras ha avisado de que las ocho autopistas de peaje en riesgo de quiebra irán a liquidación este año si no hay rescate. Ya saben que la ministra sigue 'erre que erre' insistiendo en que las radiales no le costarán un euro al ciudadano, pero si entran en liquidación el Estado -por tanto, los ciudadanos- tendrá que afrontar la responsabilidad patrimonial, que supondrá unos 4.500 millones de euros.
Por su parte, Ferrovial tiene participación en dos de las ocho quebradas, concretamente un 55% en la R-4 Madrid-Ocaña y un 52,3% en la de Ocaña-La Roda, donde cuenta con Sacyr como socio. Pero está preparada porque tiene totalmente provisionados los 270 millones que invirtió en estas autopistas.
La liberalización del AVE es otro asunto delicado. Pastor continúa sin ceder en el canon de Adif por utilizar las vías del AVE Madrid-Levante y el pasado septiembre las empresas interesadas en competir con Renfe ya mostraron su postura: o Fomento rebajaba el canon o el concurso podría quedar desierto. Una rebaja en la que ha vuelto a insistir Meirás porque si el gestor ferroviario reduce el canon "salen los números". Para optar a la liberalización, los Del Pino se han aliado con los británicos de First Group.
Otro asunto entre Pastor y Ferrovial ha sido la privatización del 49% de AENA. Lo más curioso es que al grupo de infraestructuras que preside Rafael del Pino Calvo Sotelo parece que no le salían las cuentas porque se retiraron cuando el Gobierno cerró el 'chollo Vargas'. Ferrovial decidió no entrar por considerarla una operación "forzada, dado los niveles de valoración" que alcanzó y al final los fondos especulativos entraron a saco.
Pero Meirás considera que AENA "siempre será un activo interesante" y asegura que está "fuera de la estrategia de inversión" de la compañía a corto plazo. Y va a más, ha augurado que, al igual que otros operadores de aeropuertos occidentales, acabará siendo privada en su totalidad.
En nuestro país, Ferrovial no baraja ninguna adquisición relevante, sino sólo inversiones inferiores a los 50 millones en compañías complementarias de servicios. Fuera de España la cosa es bien distinta, pues está estudiando 28 proyectos de autopistas, por un valor cercano a los 35.000 millones. La mayoría de estos proyectos se van a desarrollar en EEUU, Canadá, Reino Unido, Australia, Perú, Colombia o Chile porque Ferrovial busca crecer en sus mercados estratégicos (Norteamérica, Hispanoamérica, Reino Unido y Australia).
Pero no sólo eso, también pretende entrar en México, donde por el nuevo aeropuerto del país azteca. En concreto, por el que se construirá en Ciudad de México, un proyecto cuyo valor se estima en unos 5.300 millones. No podemos olvidar que Ferrovial no es una desconocida en aeropuertos: tiene el 25% del londinense de Heathrow, el 50% con Macquarie de los aeródromos regionales de Glasgow, Aberdeen y Southampton; y entró en el proceso de privatización del de Kansai (Japón).
En cuanto a los resultados, son buenos, mejores de lo que esperaban las analistas, pero la deuda aumenta un 16,4% hasta los 6.230 millones. El beneficio neto cayó un 45%, hasta los 402 millones por menores extraordinarios, mientras el beneficio bruto de explotación (Ebitda) fue de 983 millones ( 5,2%).
Las ventas ascendieron a 8.802 millones ( 7,8%) por el negocio de servicios ( 16,5%; 4.401 millones), impulsado por la compra de Enterprise, y la actividad internacional ( 9) -que ya supone el 69% total de los ingresos-. Por su parte, construcción siguió cayendo, al proporcionar 3.942 millones (-1%) por la menor actividad en España y Reino Unido que se compensó, en parte, con el crecimiento de su filial polaca Budimex ( 13,7%). Y en concesiones, la facturación fue de 432 millones.
Respecto a las remuneraciones, la de Rafael del Pino fue de 5,6 millones, 300.000 euros más que en 2013, y la de su número dos, Meirás, también tuvo el mismo incremento, pues pasó a ser de 5,2 millones.
Por último, sólo queda mencionar los 'líos' de la familia Del Pino, pues las relaciones de los cinco hermanos herederos, hijos de Rafael del Pino Moreno (Rafael, María, Fernando, Joaquín y Leopoldo), van de mal en peor. Recuerden que Hispanidad les contó el pasado noviembre que Fernando volvía a la carga, pues quería su parte de la herencia y volar solo, pero Joaquín también es algo rebelde. Además aún está sin resolver cómo se reparte el patrimonio en la segunda generación, es decir, la sucesión.
Cristina Martín