Continuando con la intensa semana de presentaciones de resultados de entidades bancarias, este jueves le llega el turno a Liberbank, la entidad dirigida por Manuel Menéndez, que continúa por la senda de ser más protagonista de noticias extra financieras que por su marcha económica que, como veremos, a pesar de que algunos colegas se hayan hecho eco tal cual, de la azucarada nota de prensa, que más parece un anuncio de ‘cómprame’ que un riguroso análisis de su situación.
Para empezar, lo haremos por el resultado, que es de 111 millones de euros (M€), un millón más que el pasado ejercicio, lo que en términos porcentuales es un 0,6%. Teniendo en cuenta que el resultado antes de impuestos es de 133M€, un 3,8% inferior al de 2018, la primera conclusión es que la línea del balance de impuestos sobre beneficios ha prestado el maquillaje para salvar la cara ante los que solo se fijan en la última línea de la cuenta de resultados.
Ahora vamos a ver qué ha pasado con la parte del negocio bancario, que va en la línea de lo que hemos visto, hasta ahora, en otras entidades: un crecimiento del 3,2% del margen de intereses (14M€ más), que va confirmando que los tipos de interés cero o negativos ya no perjudican tanto a las entidades financieras, ya que los créditos han crecido de forma sustancial y la nueva producción de crédito al sector privado presenta una rentabilidad media del 2,2%.
Las comisiones netas crecen un 4% hasta los 191M€, pero esta partida puede ser una trampa en los próximos meses si las grandes entidades deciden acabar con la política de franquicias. Vemos 10M€ menos por la venta de renta fija de su cartera y ajustes de esta y 14M€ negativos más en otros productos por aportaciones al FGD y al FUR principalmente. Total, 640M€ de margen bruto que es exactamente la misma cifra que la presentada en 2018.
Durante la presentación de resultados, el consejero delegado, Manuel Menéndez, ha asegurado que no tiene ninguna fusión encima de la mesa, aunque, como siempre, sigue atento a las oportunidades que puedan surgir
En el capítulo de las rebajas, perdón, de los gastos de administración, se han reducido en un 4,7% a pesar del crecimiento de un 0,4% de los de personal. La entidad continuó con su política de ajustes de plantilla y salarios, volviéndose a meter en un conflicto colectivo con su decisión de a partir de este mes de enero de 2020 rebajar los salarios de la mayor parte de la plantilla con salarios superiores a los establecidos en convenio.
Las amortizaciones crecen un 18,3% por la aplicación de la IFR16 y el margen de explotación crece un 4%, con lo que cierra con 257M€.
Para entidades como Liberbank, que procede de la fusión de antiguas cajas de ahorro, el punto de la morosidad se me antoja capital. Por las cifras, es evidente que se han encajado muchas pérdidas en tiempos pasados por la amortización de situaciones irregulares ya dotadas, o se han realizado ventas con importantes descuentos. Se pueden encontrar anuncios en estos días en los que junto con Haya Real se ofertan 975 viviendas con descuentos de hasta el 70%. En este ejercicio pasado se han destinado 60M€ a saneamiento de créditos irregulares, con una reducción del crédito moroso de 329M€ y un ratio de morosidad del 3,25% lo que parece indicar claramente la gran tarea de saneamientos que se ha aplicado. 32M€ se han destinado a saneamientos de activos a la venta no corrientes (inmuebles adjudicados por impagos) y así llegamos a un resultado antes de impuestos de 133M€, 5 millones menos que en 2018.
Para una entidad financiera como Liberbank puede resultar muy difícil superar una situación de mediana crisis sistémica con su tamaño y recursos, pero parece que después del plante al intento de fusión con Unicaja, frustrado quizás por un problema de egos o de presiones de los fondos que poseen una parte de su capital, está dispuesta a continuar por el camino de la soledad y de los resultados que no permitan retornos vía dividendos importantes. Pero algo se debe estar tramando cuando recientemente Oceanwood, uno de los fondos, ha ampliado ligeramente su participación en la entidad a pesar del horizonte de una cotización en el mercado con poco recorrido alcista, a pesar de las continuas recompras de autocartera. Durante la presentación de resultados, el consejero delegado, Manuel Menéndez, ha asegurado que no tiene ninguna fusión encima de la mesa, aunque, como siempre, sigue atento a las oportunidades que puedan surgir.