Llegaba para un periodo previsto de transición y Rosa María Mateo lleva como administradora única de RTVE desde julio de 2018 (va para 20 meses en el cargo).
Su época ha batido, según la oposición, todos los niveles de sectarismo pro gubernamental y ha propiciado el récord de demandas laborales de los despedidos.
En dos semanas Mateo había realizado hasta 77 cambios en la plantilla, en áreas como la de informativos o la dirección general corporativa.
Y en cuanto a la audiencia, sólo los informativos de La 1 perdieron 300.000 espectadores en 2019, quedándose en una media de 1,57 millones, lejos del 1,9 de Antena 3 y Telecinco. Precisamente, sobre las audiencias se ha pronunciado Mateo durante su comparecencia en la Comisión Mixta de Control Parlamentario de RTVE. La administradora del ente ha reconocido que le preocupa la "cantidad de ciudadanos que ven y oyen RTVE", si bien se ha mostrado muy satisfecha por la valoración que los españoles hacen de la "objetividad" de la corporación: "El prestigio se pierde muy rápido y se recupera muy lentamente, pero la apuesta por el rigor y la calidad es clara y prioritaria".
"No somos líderes de audiencia, es algo irrefutable, pero hemos recuperado credibilidad y pluralidad", ha contestado la administradora a las críticas desde el PP y Ciudadanos por la, a su juicio, pérdida de audiencia.
Mateo ha indicado además que continuará al frente de la radiotelevisión pública "por responsabilidad" hasta que se solucione el concurso público para elegir al futuro Consejo de Administración y a su presidente.
La responsable de RTVE ha explicado que el Gobierno le ha pedido permanecer en el puesto hasta que se culmine el proceso de reelección de la cúpula de RTVE y que ella ha aceptado continuar "por responsabilidad". "Hasta que esto se solucione, por responsabilidad, yo no cojo el bolso y me voy a mi casa (...), porque me parece un abandono del puesto de trabajo intolerable, inaudito", ha aseverado.
En febrero de 2019, Mateo aseguró en el Congreso de los Diputados que dejaría el cargo cuando hubiera un nuevo Gobierno: "En el momento en que se celebren unas elecciones y haya un nuevo Gobierno, yo presentaré mi dimisión inmediata (...) En cualquier caso, espero estar un tiempo muy determinado en este cargo. No me voy a atar a la silla en ningún momento", dijo entonces.
Sin embargo, este martes se ha desdicho y ha afirmado que estará en el puesto hasta que el Parlamento decida "quién va a gobernar" RTVE en el futuro, siempre y cuando no le pase nada: "Como soy una persona de riesgo me puedo morir por el coronavirus", ha bromeado.