Samsung Electronics quiere dar un impulso importante a su crecimiento. Pero lejos de pensar en el corto plazo, el gigante surcoreano ha anunciado este miércoles que invertirá 25 billones de wones (unos 19.227 millones de euros) en los próximos tres años en agencia artificial, en 5G y en biotecnología.

Esta inversión de 6.409 millones de euros anuales se enmarca en un plan más ambicioso cuyo monto total asciende hasta los 180 billones de wones (unos 138.540 millones de euros). Además de los sectores mencionados, la compañía pondrá especial atención en su fábrica de semiconductores, la mayor del mundo, ubicada en Pyeongtaek, al sur de Seúl. Samsung quiere seguir siendo el líder mundial indiscutible de chips, está claro.

Precisamente, esa es, tal vez, la parte menos ilusionante del plan, al menos para países como España. Y es que el 72% de los 46.180 millones anuales que invertirá la multinacional se quedará en Corea del Sur.

El esfuerzo de Samsung se traducirá, además, en la creación de 40.000 nuevos empleos directos y unos 700.000 indirectos. No está nada mal y seguro que esto contribuye de manera muy positiva a lograr otro de los objetivos de la compañía: mejorar su imagen tras el ‘caso Rasputina’ que provocó la dimisión de la presidenta del páis, Park Gen-hye, en 2017, así como el ingreso en prisión del heredero y presidente de Samsung, Lee Jae-yong, hasta el pasado mes de febrero. De hecho, el plan ha sido anunciado solo un mes después de la reunión mantenida entre Lee y el jefe del Estado, Moon Jae-in.