- Eso sí, el 'banco malo' no cumplirá su objetivo de vender 15.000 inmuebles este año: "Lo que no hacemos es ventas en pérdidas".
- El presidente de la Sareb confía en que la sociedad no le cueste nada a las arcas públicas. Difícil.
- No hay que temer una nueva burbuja inmobiliaria: los banqueros "aprenden de los errores". ¿Seguro?
- Echegoyen acudirá a las reuniones con Carmena y Colau como "oyente", con ánimo de escuchar, aunque deja claro que la incertidumbre es mala para todos.
En la corta vida de la
Sareb -dos años y medio- hay un antes y un después de la salida de Belén Romana, su anterior presidenta. Fue con Romana con quien se fraguaron las grandes operaciones, esto es, las ventas de grandes paquetes de viviendas a fondos buitre. ¿Ventaja? Se vende muy rápido. ¿Incoveniente? Se malvende a especuladores que luego venderán a un precio más elevado. Pero se marchó Romana, llegó
Jaime Echegoyen (
en la imagen) y la historia ha cambiado.
Y vaya si lo ha hecho. El actual presidente de la
Sareb está empeñado en resaltar que la sociedad no hace grandes operaciones. Esa es una imagen equivocada, ha afirmado
Echegoyen este martes, durante un desayuno informativo organizado por Europa Press. La
Sareb vende al menudeo por el canal minorista. Las grandes operaciones son cosa del pasado (esto lo digo yo, no D. Jaime). De hecho, el 'banco malo' sólo ha realizado 25 operaciones mayoristas en los dos años y medio de vida que tiene. De ellas, la gran mayoría, bajo la batuta de Romana.
Ahora lo que interesa es el menudeo, el
mercado minorista. Bien, pero tiene una desventaja: se vende más despacio. Durante el primer semestre se han vendido 5.400 inmuebles, menos que hace un año. Si al cierre de 2014 se vendían 40 viviendas al día, ahora se colocan 30. Por eso,
Echegoyen ve muy difícil lograr el objetivo de vender 15.000 inmuebles en 2015. "Estamos intentando defender el capital de nuestros accionistas y lo que no hacemos es ventas en pérdidas", ha asegurado. "Si el mercado no está en los precios que
Sareb considera razonables, en algunas ocasiones lo que tenemos que hacer es esperar", ha explicado.
¿Cuánto va a costar la
Sareb al Estado?
Echegoyen confía en que nada, aunque para ello "hay que trabajar muy duro y tener algo de suerte". Y no menos importante resulta el futuro de la economía española. Si no sigue creciendo, malo. Pero en quince años que tiene de plazo la
Sareb -ahora son doce- puede pasar de todo.
Más cercanas en el tiempo están las reuniones que mantendrá con las alcaldesas de Madrid y Barcelona, Manuela Carmena y Ada Colau.
Echegoyen acudirá a las citas como oyente, con ánimo de escuchar. "Cualquier idea, en principio, nos parece buena y tenemos que analizarla", ha afirmado. El presidente de la
Sareb es optimista y confía en que se cierren las grandes operaciones urbanísticas pendientes como, por ejemplo, al operación Chamartín, en Madrid. Lo peor, en cualquier caso, es la incertidumbre, porque impide que la gente (los inversores) tome decisones.
Por cierto, ¿teme usted que la recuperación del mercado inmobiliario y la concesión de hipotecas con mejores condiciones desemboque en una nueva burbuja?
Echegoyen cree que eso es "irrepetible", porque los responsables de las entidades financieras "aprenden de los errores". ¿Seguro?
Pablo Ferrer
pablo@hispanidad.com