- La cúpula del Parlament, ante el Tribunal Supremo: responde a la Fiscalía, acata el 155 y habla de una DUI simbólica.
- Estrategia muy distinta a la de Junqueras y los siete exconsellers encarcelados, que sólo contestaron a sus abogados.
- Por cierto, la juez Lamela rechaza los recursos y mantiene a los ocho en prisión: persiste el riesgo de fuga.
- Mientras, Puigdemont activa una "estructura estable" en Bruselas y aplaude a los piquetes del 8-N.
- Elecciones 21-D. Sánchez limitará su presencia en la campaña a petición del PSC… a pesar de que fue clave para evitar el '15-M catalán'.
Un día después de la
huelga general, el separatismo catalán ha cambiado de escenario y ha desfilado ante el
Tribunal Supremo. Allí, han prestado declaración la presidenta del Parlament,
Carme Forcadell, y los cinco
miembros de la Mesa (
Lluis Corominas, Luís Guinó, Anna Simó, Ramona Barrufet y Joan Josep Nuet), pero han sido poco valientes… para evitar la cárcel.
La cúpula del Parlament ha acudido a la citación del
magistrado Pablo Llarena y ha respondido a las preguntas de la Fiscalía. Algo que llama la atención, pues supone una estrategia muy distinta a la que tuvieron
Oriol Junqueras y los siete exconsellers (
Jordi Turull, Josep Rull, Meritxell Borràs, Raül Romeva, Carles Mundó, Dolors Bassa y Joaquim Forn) -hoy en prisión preventiva- la semana pasada, pues sólo contestaron a sus abogados.
Asimismo, Forcadell y los miembros de la Mesa
han acatado el artículo 155 de la Constitución y han hablado de que la Declaración Unilateral de Independencia (
DUI) del pasado 27 de septiembre fue
simbólica. Todo esto, unido al cambio de estrategia, forma parte de su intento para evitar entrar en prisión.
Y en parte, lo han conseguido. Finalmente, el magistrado Llarena ha ordenado prisión eludible para Forcadell si abona una
fianza de 150.000 euros, aunque esta noche la pasará en la cárcel de Alcalá-Meco. Corominas, Guinó, Simó y Barrufet han quedado en libertad y tienen un plazo de siete días para pagar 25.000 euros y evitar entrar en prisión. Y el mejor parado, sin duda, ha sido Nuet: ha quedado en libertad sin fianza. Eso sí, a todos se les ha retirado el pasaporte, se les ha prohibido salir del país y tendrán que comparecer todas las semanas.
Por cierto, el pasado miércoles, la juez de la Audiencia Nacional
Carmen Lamela ha rechazado los recursos de Junqueras y los siete exconsellers. Así, opta por mantenerles en prisión preventiva al considerar que no han desaparecido los motivos que la llevaron a tomar esta medida cautelar: persiste el
riesgo de fuga y el de reiteración delictiva.
Mientras, el expresident,
Carles Puigdemont, sigue haciendo de las suyas en Bruselas, donde tiene la compañía de cuatro exconsellers (
Toni Comín, Meritxel Serret, Lluís Puig y Clara Ponsatí). Y es que este jueves ha activado una "estructura estable" en la capital belga para coordinar la acción del "Govern legítimo", al mismo tiempo que ha recriminado a la UE su amparo "vergonzoso" a la represión del Estado español, al cual ve "enloquecido y descontrolado". Además, ha aplaudido a los piquetes del
8-N.
La respuesta al expresident ha llegado de manos de la ministra de Defensa,
María Dolores de Cospedal, quien ha insistido en que "en España nadie va a la cárcel por pensar distinto o por querer ser independentista". También le ha aclarado que su situación "complicada" ante la Justicia se debe a que ha incumplido de forma reiterada la ley y las sentencias del Tribunal Constitucional.
De cara a las
elecciones del 21-D en Cataluña,
Pedro Sánchez va a limitar su presencia en la campaña por petición expresa del
PSC, según
Europa Press. Y todo ello, a pesar de que el líder socialista fue clave para evitar el '15-M catalán' porque al final dijo 'no' a ERC y a Podemos, y por tanto, al
plan para tumbar a Rajoy. Y por ahora, Sánchez sigue por el buen camino...
Cristina Martín
cristina@hispanidad.com