José Sevilla es optimista, pero reconoce que la unión bancaria avanza a pasos muy lentos. Tuvo una gran oportunidad de sprint en la última reunión del Eurogrupo, pero finalmente, y después de toda una noche de negociaciones, los ministros de Economía no se pusieron de acuerdo. Solo salieron adelante aspectos pequeños que ya se daban por aprobados.
Para el CEO de Bankia, el modelo actual no es sostenible a largo plazo. No puede ser que los bancos se supervisen en Fráncfort, se resuelvan en Bruselas pero que la factura final la tenga que pagar el país de turno. Eso, ni es unión bancaria ni es nada. Y lo peor de todo es que 2019 será un año en blanco en cuanto a posibles avances. Todo se paraliza por las elecciones de mayo.
Durante su intervención en el encuentro financiero celebrado este miércoles y organizado por el IESE y EY, Sevilla ha señalado la dificultad que supone alcanzar la rentabilidad exigida en el contexto actual, con volúmenes de crédito aún cayendo y los tipos de interés negativos. Sí, el crédito está plano desde el año 2014 a pesar de que el PIB ha crecido un 14%.
Esto marcha.