• Aunque los líderes de las delegaciones del Gobierno y de la oposición aseguraron ayer domingo que no se retiran de la mesa.
  • A la vez, se han producido atentados terroristas en la ciudad de Homs y ataques aéreos en otras partes del país.
Atentados terroristas en la ciudad de Homs y ataques aéreos en otras partes de Siria han cubierto de pesimismo las negociaciones de paz que apenas acaban de reanudarse en Ginebra. Sin embargo, los líderes de las delegaciones del Gobierno y de la oposición aseguraron ayer que no se retiran y que seguirán en el ejercicio diplomático de intentar poner fin a seis años de guerra civil en Siria. "Nosotros permaneceremos en el proceso político para cumplir nuestros objetivos y no permitiremos ningún intento de hacerlo fracasar", declaró el líder opositor, Naser al Hariri, en una rueda de prensa, informa Noticias de Gipuzkoa. El jefe de la delegación gubernamental, el embajador Bashar al Yafari, también descartó retirarse de las negociaciones, que se han reanudado después de una pausa de diez meses, forzadas por los desacuerdos y sobre todo por ofensivas militares del régimen sirio contra posiciones rebeldes. Y, como siempre, acusaciones mutuas: esos ataques han sido atribuidos al Organismo de Liberación del Levante, un grupo terrorista creado en torno a la ex filial siria de Al Qaeda. Sin embargo, un miembro de la delegación opositora, el coronel Fateh Hassoun, expuso a la prensa supuestas pistas que hacen sospechar que el gobierno tuvo participación en esos ataques. Por su parte, el mediador de la ONU en estas negociaciones, Staffan de Mistura, no dudó en señalar que esos actos corresponden a intentos de descarrilar nuevamente el proceso de paz. "Siempre se espera que haya quienes intentan boicotear las negociaciones y habrá más. Es del interés de las partes no permitir que tengan éxito", enfatizó. Andrés Velázquez andres@hispanidad.com