Stellantis, el nuevo grupo automovilístico que ha nacido de la fusión entre el francés PSA y el italo estadounidense Fiat Chrysler Automobiles (FCA), quiere crecer en excelencia más que en números, como ha explicado su CEO, el portugués Carlos Tavares, en rueda de prensa telemática. Además, acorde a la “gran transformación” que vive el sector, apostará fuerte por la movilidad sostenible: ya tiene 29 modelos electrificados en el mercado, a los que sumará otros 10 a finales de año y desde 2025 todos los nuevos modelos tendrán una variante electrificada.
Tavares ha defendido que la fusión “es un escudo fantástico para evitar problemas sociales en ambas empresas”, respondiendo a una pregunta sobre posibles recortes de empleo. “Un escudo, una oportunidad de sostenibilidad más que un riesgo gracias a la magnitud, la diversidad geográfica la complementariedad tecnológica”, ha añadido. Es más, considera que “lo que hubiera sido dramático para los puestos de trabajo es que no hubiéramos podido fusionarnos”. Un proceso que empezó en diciembre de 2019 y ha dado lugar al cuarto grupo automovilístico en ventas, que suma 400.000 empleados con una gran “diversidad” (más de 150 nacionalidades).
Stellantis pretende lograr unas sinergias de 5.000 millones de euros anuales y obtener un flujo de caja neto positivo desde este año
Stellantis vende en 130 países y fabrica en 30 (entre ellos en España, donde tiene tres plantas -Vigo, Figueruelas y Madrid-), pero por ahora no prevé cerrar ninguna factoría y considera que “hay muchas cosas que hacer en una fábrica de coches antes que suprimir empleos”. Tavares ha destacado que “no sólo fabrican coches, sino también historias” y “hoy es el primer día de nuestra nueva historia”, con la que pretenden lograr unas sinergias de 5.000 millones de euros anuales y obtener un flujo de caja neto positivo desde este año. Y es que en su opinión, tienen una buena base para que suceda: 14 marcas fuertes e icónicas -Peugeot, Citroën, DS Automobiles, Opel/Vauxhall, Abarth, Alfa Romeo, Chrysler, Dodge, Fiat, Fiat Professional, Jeep, Lancia, Ram y Maserati-, así como una presencia bien establecida en Europa, Norteamérica e Hispanoamérica, así como la voluntad de diseñar una nueva estrategia en China y de explotar este y otros mercados como China, África, Oriente Medio, Oceanía e India.
El nuevo grupo automovilístico tendrá su sede en Países Bajos; ya cotiza en las bolsas de París, Milán y Nueva York; y acaba de presentar a su nuevo equipo ejecutivo. De cara al futuro no sólo apuesta por la movilidad sostenible, también por el coche conectado y autónomo. Para este último ya trabaja con Waymo, una empresa desarrolladora de vehículos autónomos que pertenece a Alphabet (la matriz de Google), pero no descarta hacerlo con Apple (que está conversando para aliarse con Hyundai). Además, por ahora, no dejará de producir en Brasil (algo que sí harán Mercedes-Benz, marca perteneciente al grupo alemán Daimler, y el grupo estadounidense Ford) ni en Reino Unido a pesar del Brexit.