Total sube casi un 8% (+7,94%) en la bolsa de París, donde es la compañía de mayor capitalización (unos 86.800 millones de euros), por la decisión de mantener el dividendo, a pesar del hundimiento del beneficio neto (-99%) en el primer trimestre. Y es que ha ganado sólo 31 millones en dicho periodo, frente a los 2.857 millones de hace un año, por el doble impacto del coronavirus y el desplome de los precios del crudo.
Son “circunstancias excepcionales”, ha señalado el presidente y CEO de la petrolera francesa, Patrick Pouyanné. Sin embargo, estas no repercutirán en la remuneración del accionista: se repartirá un primer dividendo a cuenta de 2020 de 0,66 euros brutos por acción, estable respecto al del año anterior. Además, el Consejo de Administración ha propuesto a la Junta de Accionistas (la cual se celebrará el próximo 29 de mayo) la distribución de un dividendo final de 2019 de 0,68 euros y ofrecerá la posibilidad de abonarlo en efectivo o en nuevas acciones.
Unas “circunstancias excepcionales” y “grandes incertidumbres” que sí se notarán en las inversiones netas: se reducirán un 25%, pasando de los 18.000 millones anunciados el pasado febrero a los 14.000 millones. Por su parte, los ingresos de Total ha sido de 40,293 millones entre enero y marzo, lo que supone un 14,3% menos que hace un año.
Eso sí, en línea con otras compañías (incluidas las de su sector), ha anunciado su ambición de llegar a cero emisiones netas para 2050 para su negocio global, el cual emplea a 100.000 personas.