• A los sacerdotes se les amenazaba diciendo que se les acusaría de pedofilia o de acoso sexual.
  • Tres sacerdotes han tenido que ser trasladados para que puedan reponerse de una situación que el portavoz del Arzobispado califica de "inimaginable", "ya no podían más".
  • La "red criminal totalmente profesionalizada" en algún caso llegó a usar la violencia.
  • Ha habido tres detenidos rumanos que se encuentran en libertad imputados de los delitos de extorsión y pertenencia a grupo criminal.
Un grupo de sacerdotes de la diócesis de Pamplona (España) fue extorsionado durante aproximadamente dos años por una red mafiosa rumana que les amenazaba con difamaciones y altercados en las parroquias para conseguir dinero. "Todo comienza por querer ayudar. Llegaban a las parroquias con niños que no tenían para darles de comer, después pedían para pagar un recibo de la luz que no les llegaba el dinero, luego para otras cosas. Pero en el momento en el que se les dirigía a otras organizaciones de ayuda controladas, comenzaban las amenazas los problemas", asegura a ACI Prensa el portavoz de la diócesis de Pamplona-Tudela, el P. José Luis Morrás-Etayo. Varios sacerdotes acudieron al obispado pidiendo un traslado de parroquia, entonces contaron todo lo sucedido. Lo que comenzó como un acto de caridad pasó a ser una extorsión en toda regla. "Si no me das dinero comenzaré a gritar, sé dónde vives … toda una clase de artimañas que conocen muy bien para obligar a que les den dinero", apunta el P. Morrás-Etayo y según informaciones publicadas en diversos medios, a los sacerdotes se les amenazaba diciendo que se les acusaría de pedofilia o de acoso sexual. Una vez que denunciaron lo sucedido ante la policía, esta comenzó una investigación, además de impartir un curso sobre cómo reaccionar ante estos casos de extorsión. "Este grupo mafioso está muy bien organizado y saben las técnicas. También había habido reyertas para quedarse con determinados lugares para mendigar, se disputaban los lugares. La policía nos ha dado algunas pautas a seguir, porque los sacerdotes sólo tenían voluntad de ayudar. Sabemos que esto es un problema que va y vuelve, porque intentaron extorsionar en otras parroquias posteriormente, pero los sacerdotes estaban prevenidos y supieron cómo actuar", explica el portavoz. El P. Morrás-Etayo explica a ACI Prensa que "por querer hacer caridad hicimos mal. Está Cáritas, hay asociaciones de la Iglesia donde verdaderamente se canaliza la ayuda que cada persona necesita. Hay veces que por querer solucionar situaciones difíciles de manera rápida se ha obrado mal, unos problemas que no eran ciertos porque estas personas han hecho de la mendicidad un negocio y la policía lo ha demostrado así". Según datos del Arzobispado de Pamplona cuatro parroquias han sido las más afectadas por esta red y tres sacerdotes han sido movilizados para que puedan reponerse de una situación que el portavoz califica de "inimaginable", "ya no podían más". La Guardia Civil ha detenido en los pasados días a tres adultos y un menor por las extorsiones, que comenzaban cuando los integrantes de esta "gran red profesional", según Morrás, contactaban con los sacerdotes en las parroquias para, con el tiempo, conseguir datos personales, sus direcciones particulares y sus números de teléfono y, posteriormente, chantajearlos con divulgar que eran autores de abusos u otros delitos, informa Efe. Los tres detenidos -una mujer, su marido y el hermano de ella- se encuentran en libertad imputados de los delitos de extorsión y pertenencia a grupo criminal tras prestar declaración en el Juzgado de Instrucción número 1 de Aoiz (Navarra), según fuentes judiciales. Una cuarta persona se encuentra a disposición de la Fiscalía de Menores. Entre las medidas que la policía ha aconsejado a los sacerdotes, se encuentran no recibirlos en solitario o en lugares privados como sacristías o despachos, referir siempre cualquier petición de ayuda económica a Cáritas y sobre todo, "interponer una denuncia en el momento que comienzan las extorsiones. No hay que callarse y tratar de solucionarlo solo, que es lo que nos ha pasado". Las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado y el Arzobispado han aconsejado a los sacerdotes que deriven cualquier petición de ayuda económica a Cáritas y que "nunca atiendan solos a las personas necesitadas, para evitar el chantaje o que se hagan una foto con ellos y con la que luego puedan ser víctimas de una extorsión", ha puntualizado. La pregunta es: ¿por qué no han sido ya expulsados de España hacia su país y que no  puedan volver a entrar nunca más? Andrés Velázquez andres@hispanidad.com