La tiranía comunista china se comporta como lo que es: una tiranía comunista, valga la redundancia.

En cualquier tiranía, los derechos y libertades quedan en suspenso. Y eso es lo que pasa en China con el derecho a la libertad de expresión e información.

La organización Human Rights Watch (HRW) acaba de acusar a las autoridades chinas de intensificar las detenciones de periodistas y activistas que informan “sobre la pandemia de la Covid-19 u otras cuestiones o critican al Gobierno”. Según un comunicado de HRW difundido en Nueva York, las autoridades chinas han llevado a cabo nuevos arrestos de periodistas y activistas “sin aportar información creíble que sugiera que esos individuos han cometido delitos legalmente reconocibles”, publicó Infobae.

“Detener a periodistas y a activistas no hará que desaparezcan los verdaderos problemas de China”, dijo el investigador de HRW para el país asiático, Yaqiu Wang, citado en la nota. Para Wang, “el Gobierno chino parece no haber aprendido nada de su represión de la información después del brote de covid-19”.

Diversos informes han acusado a China de encubrir la existencia de la pandemia en sus primeras etapas, negando así a otros países el tiempo necesario para prepararse para la ola de contagios. Un reporte del Journal of Emerging Infectious Diseases señala que una “propagación a largo plazo y no reconocida” del virus explicaría por qué el brote fue tan devastador para Italia en febrero y marzo.

Diversos informes han acusado a China de encubrir la existencia de la pandemia en sus primeras etapas, negando así a otros países el tiempo necesario para prepararse para la ola de contagios

En este sentido, la organización de defensa de los derechos humanos asegura que “las autoridades chinas han tratado de controlar la narrativa de la pandemia del coronavirus silenciando a los reporteros independientes, junto con el uso de software especializado, ‘trolls’ y censores de Internet”, añade Infobae.

Desde el inicio de la pandemia, China ha denegado el acceso a investigadores independientes internacionales para determinar qué ocurrió en Wuhan y sobre todo saber por qué se demoró en informar sobre la letalidad del virus. La OMS ha quedado en la mira por haber estado presionada por el régimen chino cuando surgió el COVID-19.

HRW recoge en su nota la detención de tres personas, el activista Ou Biaofeng y los periodistas Hze Fan, que trabaja para la agencia Bloomberg, y Du Bin, fotógrafo colaborador del periódico The New York TImes. “Desde el brote de coronavirus en Wuhan a finales de 2019, las autoridades chinas también han detenido a un número de activistas y ciudadanos periodistas por informar de manera independiente sobre la pandemia”, denunció la ONG, que aseguró que mientras algunos han sido liberados, otros permanecen bajo arresto o su situación no ha sido hecho pública, explica Infobae.

Además, hoy 28 de diciembre, la periodista china Zhang Zhan se enfrentará a un tribunal que podría condenarla a hasta cinco años de cárcel por informar sobre el estallido del brote de coronavirus en la ciudad de Wuhan bajo la acusación de “provocar altercados y crear problemas”. Zhan fue detenida en mayo, después de haber viajado a Wuhan en febrero para informar sobre el brote de coronavirus, recuerda el mismo medio.