- Señala que el mensaje se dirige "a personas con una orientación sexual distinta, negándosela y lesionando su dignidad".
- Y eso que sólo pone una evidencia biológica: "Los niños tienen pene. Las niñas tienen vulva. Que no te engañen".
- La alcaldesa de Madrid 'tomó las armas' y presumió de poner en marcha los mecanismos del Ayuntamiento…
- O sea, la policía municipal, a pesar de que no se puede secuestrar una propiedad privada sin orden judicial.
- Mientras, Cristina Cifuentes no se quedó corta: recurrió a la Fiscalía, que respondió ¡asombroso! a las pocas horas.
- Y cómo no, el fiscal mandó la inmovilización del autobús por posibles delitos de odio…
Estos días asistimos a una locura sin sentido a raíz del famoso
autobús de Hazte Oír,
un acto valiente contra el cinismo y la cristofobia del PP, que ha provocado una feroz campaña de acoso hacia esta asociación, con beneplácito judicial incluido. Y es que este jueves,
el juez Juan José Escalonilla ha bloqueado el vehículo, prohibiéndole circular,… aunque 24 horas antes ya lo había hecho
Manuela Carmena.
El magistrado de Instrucción número 42 de Madrid ha señalado que el mensaje "parece dirigirse a personas con una orientación sexual distinta, negándosela y lesionando su dignidad", según expone el auto recogido por
El País. Y eso que en el autobús sólo se puede leer una evidencia biológica: "
Los niños tienen pene. Las niñas tienen vulva. Que no te engañen". Si naces hombre, eres hombres. Si naces mujer, seguirás siéndolo". Pero, claro, estas frases van contra la famosa
ideología de género y eso es algo muy grave… y si no que se lo pregunten al director del colegio
Juan Pablo II de Alcorcón.
Lo increíble (triste e injusto también) es que ir contra la ideología de género
es mucho más grave que ofender a los cristianos. Así lo demuestran varios casos: robar formas sagradas para profanarlas en una exposición (recuerden a
Abel Azcona), entrar en una capilla universitaria desnuda de cintura para arriba y gritando "¡arderéis como en el 36!" (véase el caso de
Rita Maestre) o disfrazarse de Virgen y
crucificarse como Cristo para ganar el certamen drag queen del Carnaval Las Palmas de Gran Canaria (eso hizo
Drag Sethlas).
Volvamos al autobús de
Hazte Oír. La prohibición del juez (la única que debería tener validez), como saben, llega un día después de que la alcaldesa de Madrid,
Manuela Carmena,
tomara las armas y presumiera de poner en marcha los mecanismos del Ayuntamiento… O sea, la
policía municipal, a pesar de que no se puede secuestrar una
propiedad privada sin orden judicial. Pero doña Manuela consiguió su propósito.
Mientras,
Cristina Cifuentes no se quedó corta: recurrió a la
Fiscalía Provincial de Madrid (igual que con el director del colegio Juan Pablo II)… por si el autobús estaba cometiendo un posible delito. Y ¡asombroso!, el fiscal superior de la región,
Jesús Caballero,
respondió a las pocas horas ante la televisión y pidió al juez la prohibición e inmovilización del autobús por posible
delito de odio por orientación sexual (recogido en el artículo 510 del Código Penal, que incluye pena de prisión y multa). Claro que el magistrado
Escalonilla no ha apreciado "delito de odio", según
Actuall. Veremos en qué termina la polémica, pues seguro que habrá más capítulos.
Cristina Martín
cristina@hispanidad.com