- El embotellador vuelve a la carga: lanza un nuevo plan de bajas incentivadas para 120 empleados.
- Y todo ello, sin tener aún resuelto el conflicto por el ERE con beneficios presentado hace 26 meses.
- La semana pasada, el Supremo sólo validó los traslados voluntarios, aún queda resolver el recurso sobre la ejecución de la sentencia que declaró nulo el ERE.
- Pero hubo un "malentendido intencionado", según Pilar García (CCOO Madrid): se dijo que el TS daba por finalizado el conflicto.
- Mientras, el COIL de Fuenlabrada no se pone en marcha ni tiene inversión: "un ejército de vigilancia privada mina la moral de los trabajadores".
A pesar de que en nuestro país
Coca-Cola casi actúa como un monopolio, ante el que la CNMC mira para otro lado, la paradójicamente conocida como 'marca de la felicidad' no hace otra cosa que fastidiarnos. De hecho, continúa jibarizando el
empleo en
España y pasa del hecho de que tengamos casi 4,1 millones de parados.
En concreto, el embotellador español,
Coca-Cola Iberian Partners (CCIP) ha vuelto a la carga, pues en la tarde del pasado martes, lanzó un nuevo
plan de bajas incentivadas para 120 empleados. Dicho plan va dirigido a tres colectivos: trabajadores de menos de 58 años, de entre 58 y 62 años y de más de 63 años, según ha apuntado la Central Sindical Independiente y de Funcionarios (
CSIF).
La multinacional exigirá al menos tres años de antigüedad y la compensación no sobrepasará tres anualidades en el coste del trabajador para la empresa. Los empleados pueden adscribirse a dicho plan entre el 11 y el 22 de abril.
Sin embargo, este nuevo plan de bajas incentivadas se produce sin tener aún resuelto el conflicto que surgió tras el
ERE con beneficios presentado por CCIP hace 26 meses. Al hilo de este asunto, conviene recordar que la semana pasada, el Tribunal Supremo (TS) sólo validó los traslados voluntarios, pues aún queda por resolver el recurso sobre la ejecución de la ejecución de la sentencia que declaró nulo el ERE. Pero hubo un "malentendido intencionado", según señaló
Pilar García Torres a Hispanidad. La responsable de Política Industrial y Servicios de Madrid nos explicó que se dijo que el TS daba por finalizado el conflicto, cuando en realidad sólo decidió sobre un tema.
Mientras, el Centro de Operaciones Industriales y Logísticas (COIL) de
Fuenlabrada no se pone en marcha ni es objeto de ninguna inversión. Es más, la única que se ha hecho es "un ejército de vigilancia privada, que mina la moral de los trabajadores", nos contó García Torres. "Les están tratando como si fueran delincuentes", añadió.
Recuerden que no es la primera vez que hablamos de que en el famoso COIL, los empleados llevan meses sin dedicación efectiva.
En enero, ya apuntamos que en dicho centro, que en teoría iba a ser de excelencia, no había actividad industrial ni logística.
Paralelamente, hay que aguantar que Coca-Cola nos dé lecciones: en su última campaña publicitaria a nivel mundial, escogió el lema 'Siente el sabor' para decirnos que su refresco hace los momentos especiales. Sin embargo, a juzgar por su comportamiento en España, podríamos describir ese sabor como maltrato y desprecio, a pesar de la buena cantidad de millones que gana aquí.
Cristina Martín
cristina@hispanidad.com